LA EDAD DE ORO EN GUANTÁNAMO

Por primera vez en Cuba, la más oriental de las provincias recibió la revista infantil, hace 125 años, en la Sociedad La Luz.

WALKIRIA JUANES SÁNCHEZ,
estudiante de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana..
Foto: Demetrio Fuentes Rodríguez

La Edad de Oro fue leída por primera vez en Cuba en la Sociedad La Luz. Hace 125 años este antiguo centro de recreo, ubicado en Guantánamo, fue la sede principal del trabajo de los revolucionarios criollos encargados de distribuirla por todo el país.

El santiaguero Amador Esteva, establecido desde 1870 en la más oriental de las provincias, recibió en julio de 1889 la revista, publicada días antes en Nueva York, Estados Unidos. A petición de José Martí, quien lo consideraba un amigo, el patriota repartió los primeros veinte ejemplares que llegaron a la Isla.

En una carta enviada a Esteva, el Apóstol escribió: “Vemos esto como una empresa del corazón y no de mero negocio. Esta misiva, valgan verdades, no se la escribiría si no le hubiese ofrecido al editor de La Edad de Oro, buscarle por medio de usted, un buen agente en Guantánamo y le ruego que recoja del correo, ese paquete del primer número que le va certificado”.

Martha Reyes Noa, periodista e investigadora del Centro de Arte y Literatura de la provincia, comentó que el destacado poeta y ensayista Regino Eladio Boti, adquirió y conservó dicha misiva, fechada el 27 de julio de 1889, como prueba de entrada de La Edad de Oro al país por la zona oriental.

Raisa Martín Lobo, investigadora de la Dirección Provincial de Cultura, afirmó que “la llegada de La Edad de Oro influyó en el ánimo, el fervor y la formación del mambisado en este territorio oriental, pues entrega, amor y vehemencia es esa obra, que consolida el sentimiento de pertenencia que tuvo Martí por su tierra”.

“Entonces correspondía a los cubanos coordinar todo lo pertinente para garantizar las suscripciones, correspondencias y clubes de lectores, en torno a la publicación de la obra que dedicara el Maestro a los niños de América, y de la cual solo fueron publicados cuatro ejemplares”, agregó Adriel Bosch Cascaret, investigador del Museo Provincial.

Explicó que en el edificio ubicado en la esquina de las calles Calixto García y Emilio Giró, radicaba la Sociedad. Durante el paso de los años fue liceo, imprenta, hotel, y en la actualidad sus ruinas la comparten una cafetería y varias oficinas.

Acerca de la recepción que tuvo la revista el primer día no aparecen referencias documentales, aunque la voz popular da cuenta de la posibilidad de que exista en manos de un coleccionista reacio a entregarla. Pero esto queda en el terreno de las suposiciones.

Una confrontación entre criollos y peninsulares aceleró el surgimiento de la Sociedad La Luz. Fundada en 1889, fue centro de conspiraciones contra la metrópoli española. A este proyecto se sumaron acaudalados independentistas cubanos y catalanes de ideas liberales.

Hoy, Guantánamo acumula entre sus méritos ser pionera en la recepción de La Edad de Oro, la primera y última villa fundada por los españoles, el único Zoológico de Piedra existente en el país, y el Viaducto La Farola, una de las maravillas de la ingeniería civil cubana.

Pie de foto: Esta tarja, ubicada sobre los restos del antiguo centro La Luz, reconoce la llegada de La Edad de Oro a Cuba por Guantánamo, entonces punto de distribución de la revista al resto del país.

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