Blogia
Isla al Sur

UN ESPACIO PARA DEJAR VOLAR LA IMAGINACIÓN

UN ESPACIO PARA DEJAR VOLAR LA IMAGINACIÓN

La Fundación Rafael Pombo fomenta el gusto por la lectura para el desarrollo del pensamiento creativo, la autonomía y la solidaridad en los niños.

YERALDIN BRICEÑO MARTINEZ,
estudiante de cuarto semestre de Comunicación Social,
Universidad Cooperativa de Colombia, Sede Bogotá.

En el barrio de La Candelaria, en el centro de Bogotá, se encuentra ubicada la casa donde nació el poeta Don Rafael Pombo, declarada Monumento Nacional, y en la actualidad un espacio para la lectura y para dejar volar la imaginación.

La entidad, sin ánimo de lucro, fue fundada en 1986 bajo la presidencia de Belisario Betancourt, y la idea surgió de una viaje a Europa del entonces presidente colombiano, quien copió la intensión de castillo encantado, la trajo y la instaló en Bogotá, en la calle 10 con carrera 5, para así tener un lugar donde homenajear las obras literarias de Rafael Pombo, convirtiéndose en un sitio muy apreciado por los niños.

La Fundación cuenta con una sala de lectura infantil que contiene magnificas bibliotecas multiformes y coloridas, la cual nació de la alianza del expresidente con el Banco de la República, este inicialmente hizo una donación de una colección de literatura para niños. En ella se implementan estrategias para el desarrollo del pensamiento creativo y el gusto por la lectura con actividades como la expresión artística, las artes dramáticas, las artes plásticas, la expresión corporal, la danza y la música.

“Esta biblioteca es muy buena, hay muchos cuentos bonitos y entretenidos, me gusta venir porque hay distintas formas de aprender, además, está el teatrín para presentar obras de hechas por nosotros mismos”, dijo Joel Quintero, un pequeño lector de la Fundación.

La pedagogía utilizada es una herramienta alternativa para la formación de niños de primera infancia, se enfoca en el fomento al gusto por la lectura para descubrir el placer de leer, escribir y relatar; la creatividad en los procesos de información, el juego y el derecho a la participación.

De forma permanente se realizan actividades de promoción de la lectura tales como el Club de lectura Rin Rin, Hora del cuento, Tardes encantadas, Encuentros con escritores y Lectura al balcón. También se podrá encontrar talleres en los cuales se fomenta la creatividad a través del juego, la literatura y la vida cotidiana como recurso para el conocimiento de sí mismo y el mundo, explicó Maira Ricardo, coordinadora de la sala de lectura.

El objetivo primordial es la construcción de una cultura de los derechos de la infancia, en particular el derecho a la participación. Esto lo hacen generando espacios específicos que favorecen a las experiencias afectivas que transforman a los niños.

Esos espacios existen de lunes a viernes de 8:30 a.m. a 5:00 p.m. y los sábados de 9:00 a.m. a 1:00 p.m. Todo lo que se hace en esta Fundación va dirigido a niños entre las edades de 5 a 8 años que son quienes frecuentan más la biblioteca especializada en literatura infantil y juvenil, afirmó Karen Hernández, secretaria de la institución.
 

0 comentarios