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Isla al Sur

¡COMPRO CUALQUIER PEDACITO DE ORO!

¡COMPRO CUALQUIER PEDACITO DE ORO!

El desarrollo de la sociedad y el surgimiento de nuevas formas de vender, ha provocado la desaparición, casi total, del pregón en la Isla.

LIZ ARMAS PEDRAZA,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana. 

Según el Diccionario Oxford de la Música, el pregón nació en el siglo XIX. Sin embargo, a 200 años (2015) del surgimiento del pregón en Cuba, un sondeo realizado entre 30 profesores de la Facultad de Música, del Instituto Superior de Arte (ISA), mostró que el 60 por ciento piensa que el pregón se ha extinguido y un 20 por ciento afirma que aún existe, aunque si no es rescatado podría desaparecer pronto. Mientras, el otro 20 por ciento coincide en que el pregón sigue siendo una forma de vender los productos en Cuba.

Mayra Roque, jefa del departamento de Música del ISA, expresó que ellos deberían pensar en poner una optativa sobre el pregón y su historia porque “si bien aún existe, ha ido menguando con el tiempo. Sería muy triste perder de las calles cubanas a tan original animador”.

“Lamentablemente, este canto ya no existe, porque no creo que esas personas que andan anunciando sus productos sean pregoneros. No responden a ningún tipo de música popular, y en la mayoría de las cosas lo que gritan no tiene rima”, opinó Adelfa Fundora, maestra de música del ISA.

Por otra parte, José Luis Peláez, profesor de música de esa institución, y uno de los encuestados, dijo que en esa academia se enseña muy poco sobre el pregón: “Aunque sí se les habla a los estudiantes de El manisero, de Moisés Simons, y Frutas del Caney, de Félix Cainet, muy pocos saben que esas canciones surgieron de esa forma tan novedosa de anunciar.”

Mientras tanto, Ahmed Muñiz, también profesor del centro, comentó que el pregón no ha desaparecido de las calles cubanas. “Ese canto es intrínseco de nuestra cultura, y a pesar de que el tiempo pase, siempre van a existir personas que rescaten tan bonita tradición”, agregó.

Según afirma Miguel Barnet en el libro El pregón: un personaje anónimo de nuestro folklore, estos son gritos o voces especiales de los vendedores o artesanos para anunciar su mercancía. La particularidad de los pregoneros es que utilizan música campesina o géneros populares como el son y la guaracha, y luego lo cantan.

“Yo he vivido en este lugar desde que nací. Cuando era chiquita, me encantaba asomarme al balcón para oír a los vendedores. Pero ahora no hay pregón ni pregoneros. Los que pasan por aquí son unos gritones, que lo que hacen es molestar”, declaró Librada Paz, quien tiene 86 años y es vecina del Centro Histórico, del municipio capitalino Habana Vieja.

En las calles de Obispo, barrio de la Habana Vieja, caminan varias personas disfrazadas a la antigua, que pregonan lo que venden. Sin embargo, la mayoría no lo hace porque les guste o para rescatar el pregón.

“Te confieso que a mí no me hace ninguna gracia estar todo el día con un traje caluroso y gritando para que la gente me compre. Yo lo hago porque este es mi trabajo, de aquí yo saco el dinero para vivir. Aunque también te puedo decir que a las personas, sobre todo a los extranjeros, les gusta mucho vernos animando las calles”, declaró Viviana Santos, vendedora de flores.

María Carla Vázquez, estudiante de segundo año del ISA, opinó que el pregón en la actualidad se ha reducido al cansón y monótono “¡Compro cualquier pedacito de oro!” Ese grito ha estado expandiéndose por toda Cuba, “y aunque algunos lo vean como un canto popular, para mí no lo es, pues carece de musicalidad.”

Alejo Carpentier, en su libro Pregones Habaneros, escribió que “hay oscuras supervivencias, tradiciones de origen remoto, en esos anuncios vocales, en esos instrumentos primitivos de que se vale el profesional o vendedor ambulante para señalar su presencia.”

“Muy a pesar de que los pregones son viejísimos y populares, han sido poco estudiados. En los últimos tiempos han estado marcados por la contemporaneidad, y muchos han cambiado su forma y estructura, pero es necesario protegerlos como parte de nuestro patrimonio”, acotó Porfirio Reyes, jefe del Departamento de Música Popular, del Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana (CIDMUC).

Aunque la situación actual del pregón y los pregoneros en Cuba es crítica, existen todavía vendedores, aunque pocos, que no dejan que este canto se convierta en una estampa del pasado.

Así lo demuestra Serafín Columbié, conocido por los vecinos del municipio habanero Boyeros, como “El bizcochero”: “A mí me fascina poder vender a través del canto, y no solo vender, sino transmitir emociones. Yo tengo un pregón para cada estado del ánimo, y ya mis clientes saben cuándo estoy triste, alegre, nostálgico”.

Nicolás Guillén, en el libro Prosa de Prisa, define muy bien al oficio y a los que lo practican, al plantear que “son seres melosos, casi angelicales, para quienes la vida tiene una brillantez niquelada y musical (…) Y es que el pregón tiene sus secretos. Por algo es un arte que no todo el mundo puede dominar. Los elegidos, los que escalaron cumbres más altas, alcanzan resultados sorprendentes.”

Para Miguel Lavastida, vendedor de maní del barrio Casablanca, en el capitalino municipio Regla, el pregón es una forma de defender nuestra identidad. “Por eso es que yo anuncio: ¡Traigo maní fresco, maní tosta´o, maní para aquel que se siente cubano!”, dijo mientras se alejaba caminando.

Pie de foto: El pregón es expresión de la profunda riqueza poética y musical cubana.

Ficha Técnica:

Tipo de título: Llamativo.
Tipo de lead: Sumario de Cuándo.
Tipo de nota interpretativa: Explicativa.

Tema: Situación actual del pregón en Cuba.

Situación problémica: Un sondeo realizado entre 30 profesores de la Facultad de Música, del Instituto Superior de Arte (ISA), mostró que el 60 por ciento piensa que el pregón se ha extinguido, un 20 por ciento afirma que aunque aún existen, si no son rescatados podrían desaparecer pronto, y el otro 20 por ciento coincide en que el pregón sigue siendo una forma de vender los productos en Cuba.

Objetivos Colaterales: Promover el estudio del pregón en Cuba, como expresión folclórica de nuestro canto popular.

Estrategia de fuentes:

Documentales:

El pregón: un personaje anónimo de nuestro folklore: Miguel Barnet. Publicado en La Habana, en 1998.

Pregones Habaneros: Alejo Carpentier. Publicado en La Habana, en 1994.
Prosas de Prisa (Tomo I): Nicolás Guillén. Publicado en La Habana, en 1975.

Directas:

Un sondeo realizado entre 30 profesores de la Facultad de Música del Instituto Superior del Arte (ISA).

José Luis Peláez: profesor de música del ISA. Fuente especializada. Juicio analítico y de valor.

Ahmed Muñiz: profesor de música del ISA. Fuente especializada. Juicio analítico y de valor.

Mayra Roque: jefa del Departamento de Música en el ISA. Fuente especializada. Juicio analítico y de valor.

Librada Guerra: vecina del Centro Histórico. Fuente Testigo. Juicio de valor.

María Carla Vázquez: estudiante de segundo año del ISA. Fuente secundaria. Juicio analítico y de valor.

Viviana Santos: vendedora de flores en La Habana Vieja. Fuente implicada. Juicio disyuntivo.

Porfirio Reyes: jefe del departamento de Música Popular, del Centro de Investigación y Desarrollo de la Música Cubana (CIDMUC). Fuente oficial. Juicio analítico y de valor.

Serafín Columbié: vendedor de bizcocho en Boyeros. Fuente implicada. Juicio de valor.

Miguel Lavastida: vendedor de maní en Casablanca, Regla. Fuente implicada. Juicio de valor.

Soportes:

Hecho: Desaparición del pregón en Cuba.

Antecedentes: El desarrollo de la sociedad, y el surgimiento de nuevas formas de vender, ha opacado al pregón en la Isla.

Contexto: Este 2015 se cumplen 200 años del surgimiento del pregón en Cuba.

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