LA SIEMPRE TALENTOSA FELA JAR
A los 91 años de edad, esta mujer icónica de la cultura cubana repasa su tránsito por ella: actriz, modelo comercial, locutora, profesora de actuación y productora teatral, mereció el Premio Nacional de Televisión por la obra de la vida y la condición de Artista de Mérito de la Radio y la Televisión.
ELIN DRIGGS LUZARDO,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.
Ahora se pasa casi todo el tiempo en casa, ya no sale a la calle prácticamente a nada; eso sí, se asoma al portal para saludar y conversar con los vecinos, que la adoran. A los 91 años conserva buena memoria y apariencia física para tan avanzada edad, un bastón para trasladarse es lo único que necesita.
Felisa Jar González, destacada actriz de radio y televisión, está orgullosa de ser cubana y habanera ciento por ciento: nació y vivió en el Vedado, cerca del ahora parque John Lenon, en la céntrica avenida G, hasta los doce años cuando el padre falleció y con el dinero que dejó, la madre compró un edificio de cuatro apartamentos en la barriada capitalina de Santos Suárez, a donde se mudó con la familia para vivir en uno de ellos y alquilar los otros. Ya nunca más se marchó de ese lugar.
“Llegué a la actuación por puro accidente. Mi familia es española y desde pequeña visitaba con mis padres la Sociedad Artística Gallega de La Habana, donde al final de cada mes se hacían obras de teatro en las que comencé a participar. Fue allí donde recibí mis primeras clases de actuación y declamación que impartía el maestro Joaquín Riera, quien acostumbraba llevarnos a la radio para pequeñas actuaciones en emisoras de aquella época.
“Así, muy joven, con 16 ó 17 años, interpreté por primera vez la novia del protagonista de la famosa novela Leonardo Moncada, que se oía muchísimo entonces. Por ahí están mis inicios”.
Simultáneamente, estableció vínculos con el grupo de la Academia de Arte Dramático y el Patronato del Teatro, con este último ganó la estatuilla Talía a la mejor actuación del año en el rol protagónico del personaje de Blanche, en la obra Un tranvía llamado deseo.
“Más tarde tuve la suerte de estudiar en la recién inaugurada Escuela Municipal de Arte Dramático, por espacio de tres años, donde me gradué en la primera promoción junto a Vicente Revuelta, con quien trabajé en la puesta en escena inicial del grupo de aquella academia. Ya graduada, me evalué como profesional en la Asociación Cubana de Artistas Teatrales. El teatro me atrapó y durante muchos años lo hice bastante porque me gustaba, fíjate que lo hacía hasta gratis, no cobraba ni un centavo.
“Nunca abandoné la radio, primero audicioné en programas para nuevos talentos en la CMQ Radio, y muy poco tiempo después, quizás un año más o menos, participé en RHC Cadena Azul, donde fui seleccionada ganadora por el jurado. En esa emisora también actué para el concurso de Voces Nuevas y gané la final junto a Consuelito Vidal y Raúl Selis”.
Se acomoda en su asiento para, mediante una anécdota, recordar un momento importante de su vida profesional.
“Sentada en el lobby de la emisora Cadena Azul, entró Paco Alfonso, quien escribía programas para la misma. Al reconocerme de mis actuaciones teatrales, se acercó para preguntarme si era capaz de hacer de guajira, le dije que sí. Se trataba de un personaje difícil, una muchacha campesina, por supuesto, que la violaban los guardias rurales y tenía que gritar y dramatizar bastante. La actuación fue un éxito, ovacionada por el equipo de actrices que trabajaba conmigo”.
Amado Trinidad, propietario de la emisora, cuando la vio actuar no vaciló ante la calidad de interpretación que había realizado y de inmediato encargó que le hicieran el contrato. Así de talentosa ha sido siempre Fela.
“Radio y teatro fue lo que más hice, aunque también realicé algunas cosas en cine con apariciones en películas como Cecilia Valdés, La Hija del Pescador y, recientemente, hace dos años y medio o tres, vinieron a buscarme para otra película, pero dije que no porque ya no puedo con el trasporte público y no tengo quien me mueva”.
Sencilla, conversadora, reconoce que es una mujer apolítica, consejo que siempre le dio el padre; pero al triunfar la revolución, se incorporó a determinadas tareas por ver la justeza en los proyectos sociales que comenzaban a ejecutarse. Gusta decir que la misma tiene dos grandes méritos: haber derrocado la tiranía de Batista y acabado con la ignorancia de las personas.
“Participé en la Campaña de Alfabetización, viajábamos a diario desde la CMQ hasta San José de Las Lajas, donde enseñé a leer y escribir a un matrimonio al que tenía que llevarles dulces para `engañarlos´ porque no querían alfabetizarse. También, ser artistas nos abrió el camino. Al final, lo logramos”.
La televisión no quedó detrás en la vida artística de esta mujer, fundadora de tres canales en nuestro país, por lo que desde sus inicios se vio incorporada a su programación. Habla de los distintos programas en los que actuó.
“Recuerdo en especial En silencio ha tenido que ser, es el serial al que dediqué todo el tiempo mientras estábamos filmando, tuvo un excelente escritor, Abelardo Vidal, y director, Jesús Cabrales, además de la calidad de los actores y actrices que formaron el elenco. Todavía recibo llamadas telefónicas de algunos. Aún recuerdo a Carlos Moctezuma, muy jaranero y a la vez muy serio en la filmación. Con esa serie tuve la posibilidad de viajar a Nicaragua y conocer aquel maravilloso país y su historia al enfrentar la dictadura de Somoza”.
Quizás por los años o por su gran modestia, expresa que recibió muchos premios en su extensa carrera profesional, pero no recuerda cuáles son. Menciono algunos de ellos y observo su reacción visiblemente emocionada: Medalla Alejo Carpentier, Distinción Raúl Gómez García, Premio Nacional de Televisión por la obra de la vida 2004, Micrófono por el aniversario setenta de la Radio Cubana, Moneda Conmemorativa por el aniversario ochenta de la Radio Cubana y la condición de Artista de Mérito de la Radio y la Televisión Cubana, además de múltiples reconocimientos por actuaciones de Teatro.
“Fueron muchos, ya tú viste, no podía acordarme de ellos. Mi vida en aquellos tiempos era intensa, desde por la mañana hasta la tarde hacía radio y después, por la noche, televisión; no sentía cansancio porque estaba haciendo lo que quería. También seguí estudiando en el Instituto Superior de Arte, donde obtuve el título de Licenciada en Artes Escénicas. No paraba.
“En la radio nunca me escuché, primero, porque era en vivo, y después, realmente por no tener tiempo, siempre estaba trabajando. Déjame decirte que yo nunca tuve ni tengo radio.
“No pensé dejar de hacer programas nunca, quería trabajar hasta la muerte, pero el transporte me retiró, pasaba mucho trabajo para ir y venir hasta para coger máquinas hacía colas; además, gastaba más de lo que ganaba.
“Han venido a hacerme varias propuestas, pero las he rechazado, estoy cómoda en casa, he encontrado en la lectura un gran placer y, contrario a lo que pensé, no extraño la profesión a la que dediqué 59 años de mi vida. Si ahora mismo vinieran de nuevo a proponerme actuar, diría que no”.
Esta mujer excepcional no descansa, aún en la actualidad sigue ocupando su tiempo en cosas útiles, como recorrer el mundo y el conocimiento desde la lectura. ¿Y si volviera a nacer? Pienso que de seguro querría volver a ser artista.
“No. Preferiría ser arqueóloga y estudiar las profundidades del suelo, es fascinante descubrir la historia de las sociedades antiguas”.
Pie de fotos: 1-Fela Jar, reconocida actriz de la televisión, la radio, el teatro y el cine, en el protagónico de Cándida, en la película Irremediablemente juntos (Tomada del sitio www.ecured.cu): 2-A pesar de su edad, ocupa el tiempo en recorrer el mundo desde la lectura (Foto: Elin Driggs Luzardo).
Ficha técnica:
Objetivo central: Realizar un homenaje a Fela Jar.
Objetivos colaterales: Indagar sobre la trayectoria artística de Fela Jar. Resaltar su figura como celebridad de la cultura cubana y sus múltiples reconocimientos a la obra de toda la vida.
Tipo de entrevista:
Por los participantes: Individual.
Por su estructura: De citas.
Por su contenido: Retrospectiva.
Por el canal que se obtuvo: Vía directa (cara a cara con la entrevistada).
Tipo de título: Con el nombre de la entrevistada.
Tipo de entrada: De retrato.
Tipo de cuerpo: De citas.
Tipo de conclusión: Anticlímax.
Tipo de fuentes: No tradicional y Directa.
0 comentarios