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Isla al Sur

¿DÓNDE NACIÓ FÉLIX VARELA?

¿DÓNDE NACIÓ FÉLIX VARELA?

El sitio exacto en que vio la luz el precursor de nuestra independencia nacional aún es una duda para investigadores, y asunto ignorado por la mayoría de los cubanos.

Texto y foto:
GABRIELA M. FERNÁNDEZ MÉNDEZ,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.

Un niño nacido en la calle habanera del Obispo y trasladado a los pocos años desde ese sitio hacia la Florida. Hijo y nieto de militares españoles devenido seminarista en su juventud. Más tarde sacerdote aficionado a la música, especialmente a tocar el violín. Profesor y filósofo iniciador de la docencia experimental en la Física y la Química.  Diputado por la Isla en las Cortes liberales ibéricas y, finalmente, revolucionario desterrado a Estados Unidos durante largas décadas hasta su muerte, a causa de una prolongada enfermedad que enfrentara en solitario. Ese fue el Padre Félix Varela.

Se desconocen otros detalles de la vida del religioso e independentista, cuyo expediente se encuentra actualmente en el Vaticano, en dilatado proceso de canonización. El lugar exacto donde nació es uno de esos aspectos ignorados por la población, e incluso, motivo de contradicciones entre sus biógrafos e historiadores. Tal incógnita se traduce en la ausencia de una inscripción o placa que señale el sitio de la ciudad considerado por algunos como el de su nacimiento. 

Por un bulevar concurrido…

De los a diario incontables transeúntes de la calle Obispo, pocos imaginan la polémica histórica existente sobre el número 462, entre Aguacate y Villegas. La casa colonial de dos plantas llama la atención por un cartel anunciando la existencia, en lo alto, de un estudio de pintura. Pero esa es solo una de sus funciones, pues la institución radicada en los bajos del inmueble tiene una relación mucho más directa con la  historia del lugar.

La Biblioteca Pedagógica “Félix Varela” es de carácter museológico, debido al contenido específico de sus documentos. Según la especialista principal de la Casa, Yalile Amado Batista, no se trata de un centro público.

“Nuestros usuarios provienen de un sector determinado, buscan referencias científicas concretas sobre Historia de la Educación en Cuba, desde la Colonia hasta los primeros años de la Revolución. Entre los volúmenes existentes podemos encontrar libros de texto, programas de clases, guías metodológicas y literatura pedagógica de esas épocas.”

La mencionada biblioteca surgió en el año 2005, al trasladar la reserva bibliográfica del Museo de la Educación a dicho edificio, restaurado desde el 2002. La casa estaba en desuso. Los estudios hechos sobre el local demuestran que anteriormente no solo se había utilizado como vivienda: desde inicios del siglo XX fue sede de la Sociedad Mercantil Enrique Fernández Cía., después un negocio de confecciones y finalmente albergó las oficinas del Sindicato de la Construcción, a partir de la década de los 80 del siglo pasado.

Los trabajadores de la actual institución están convencidos del valor especial del sitio. Sergio González García, director de la Casa Félix Varela, como también se conoce, no tiene dudas sobre la relación de ese lugar con el nacimiento del sacerdote precursor de nuestra independencia.

“La Biblioteca está ubicada en los terrenos de la casa natal de Varela. No se puede hablar del edificio presente como el primer hogar del Padre, porque sería incorrecto, por varias razones, incluyendo la arquitectura de la vivienda, con características propias de fechas posteriores al suceso en cuestión. De todos modos, es posible referirse al espacio ocupado hoy por la institución como la locación de la morada de Félix Varela y Morales”

A partir de sus experiencias con tantos visitantes y usuarios, Yalile Amado cuenta orgullosa esta anécdota: “Una profesora muy instruida expresó que no podía irse de aquí -de la biblioteca-, ‘Imagínense, siento mucha paz, aquí nació un santo’, dijo.”

Polémica entre investigadores

La primera biografía del presbítero Félix Varela, escrita por José Ignacio Rodríguez a finales del siglo XIX, no especifica el lugar de su nacimiento en la Ciudad de La Habana. A partir de esa ambigüedad inicial, el resto de los estudiosos de la figura del sacerdote e intelectual, hasta nuestros días, no han llegado a un consenso entre las distintas hipótesis sobre el sitio del alumbramiento. 

Félix Francisco José María de la Concepción Varela y Morales nació el 20 de noviembre de 1788, según la Partida de Bautismo número 866, folio 203 del libro Sexto de Blancos, firmada por Fray Miguel Hernández en la Parroquia del Santo Ángel Custodio, de La Habana. Contrario a lo usual en los documentos de la época, el manuscrito no hace referencia al lugar de nacimiento de la criatura.

En apreciación del historiador Eusebio Reyes, una de las causas de la polémica es la no constancia de la ubicación exacta de la casa natal en los originales encontrados hasta el momento: “Ni en la partida de bautismo, ni en el expediente de órdenes de Félix Varela y Morales, se ha podido hallar el sitio preciso de su nacimiento.”

Además, argumenta Reyes, influye el criterio común entre investigadores sobre el poco uso que diera el Padre Varela a la vivienda de Obispo, dado su temprano traslado a San Agustín de la Florida, en Estados Unidos, siendo un niño,  luego su  internado en el Seminario habanero de San Carlos y San Ambrosio, para más tarde ser ordenado sacerdote y resultarle imposible vivir fuera de los recintos monásticos.

“Al ser habitada la casa por Varela durante tan cortos períodos, es menos probable la existencia de registros sobre del lugar de su domicilio. De este modo, existen tantas versiones y elementos para establecer la locación precisa de éste, como investigadores se han dedicado al tema”, deduce Eusebio Reyes. 

Monseñor Carlos Manuel de Céspedes García-Menocal, en su libro Pasión por Cuba y por la Iglesia. Biografía del presbítero Félix Varela, asegura que Varela vino al mundo en “la casa paterna, marcada con el número 91 de la calle del Obispo, situada entre Aguacate y Villegas”. Teniendo en cuenta los cambios en la distribución numérica en la manzana a lo largo de estos siglos, la vivienda señalada con el 91 a fines del siglo XVIII, corresponde a la actual 462, o sea, a la locación de la Biblioteca Pedagógica Félix Varela.

Por otro lado, de acuerdo al criterio del Doctor Eduardo Torres-Cuevas, Profesor Titular de la Universidad de La Habana y biógrafo del precursor independentista, en efecto, concuerdan los números de la vivienda de aquella época y el del edificio de la biblioteca de la actualidad, pero no se puede afirmar que se trate del mismo predio o solar, al tener en cuenta posibles cambios en la estructura de la cuadra.

“La respuesta a este dilema formaría parte de una investigación aún por hacer en los planos históricos de los barrios de la ciudad”, agregó Torres-Cuevas. En opinión del estudioso, es necesario considerar también la posibilidad del desglose del inmueble original, o sea, la probable división de aquella propiedad con dos plantas para hacer un par de recintos independientes, lo que resulta una característica de esta época y no de aquella, en la cual el joven Félix residiera en el edificio. 

Los hábitos del período colonial constituyen otro factor a valorar ante el enigma del nacimiento del multifacético cubano. “En aquel tiempo se observaba la costumbre de esperar los alumbramientos en el hogar de la familia materna”, afirma Rosalía Oliva Suárez, especialista del Gabinete de Arquitectura de la Oficina del Historiador, a partir de sus estudios sobre esta edificación del bulevar Obispo.

Por tanto, si bien esta investigadora se encuentra entre los que consideran la ubicación de la casa paterna de Varela en el espacio ocupado hoy por la biblioteca, agrega una nueva conjetura: la posibilidad de que el niño naciera en la residencia de su abuelo materno, don Bartolomé Morales, cuya locación, por lo confirmado años atrás, era precisamente al lado de la casa de los Varela y Morales, sobre la misma calle Obispo.  

“La casa donde Félix Varela nació y vivió fue destruida mucho tiempo atrás, de acuerdo con las actas revisadas en el Archivo Nacional sobre las cuadras y calles habaneras. El área ocupada por  la Biblioteca Pedagógica fue la de la vivienda del abuelo materno, pues ambos edificios, el de los Varela y el de los Morales, eran aledaños”, tal es la opinión de Perla Cartaya Cotta, historiadora y pedagoga del Seminario de San Carlos y San Ambrosio.

Las indagaciones de esta profesora le hacen suponer la residencia natal a uno de los lados más próximos del inmueble actual en cuestión, hoy una cafetería a espacio abierto, y con la construcción típica del siglo XX.

“Aunque no hubiera nacido específicamente en aquel sitio preciso, el Padre Varela dio su primer aliento muy cerca de él, en esa calle y en esa cuadra. Solamente el hecho de haberle puesto el nombre del gran pensador y pedagogo a la institución, ya es un homenaje merecido”,  concluye Perla Cartaya.

Para que todos lo sepan…

No solo personas como Patricio González, que transita frecuentemente por delante de la hermosa fachada de balaustres de madera sin detenerse a mirar al interior, desconocen el posible vínculo de ese lugar con la ilustre figura histórica. Un profesor, usuario regular de los servicios de la biblioteca, no había escuchado de tal probabilidad.

Nelson Davil, catedrático de la Universidad de La Habana, afirmó conocer las funciones del local, pero no haber tenido idea de la versión de ese espacio como el primer hogar del Padre Varela. En tal caso, pregunta si se trataría además de un museo. En otra ocasión, cuentan que una bibliotecaria del Fondo de Bienes Culturales entró al hermoso salón e interrogó sobre su labor, asegurando no tener conocimiento de la existencia de la Biblioteca especializada.

Tales incidentes son, entre otras situaciones, resultado de la carencia de algún tipo de placa o tarja para identificar el sitio histórico. Si bien Sergio González, director de la Biblioteca, afirmó que una placa oficial está en vías de aprobación, funcionarios de organismos pertinentes ofrecieron informaciones más precisas al respecto.

Mirna Leyva, especialista de la Vicepresidencia de Monumentos del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural, adscrito al Ministerio de Cultura, describe el procedimiento para reconocer un lugar con valor patrimonial: “Cualquier persona natural puede propiciar el inicio del proceso si tiene terminada una investigación de suficiente rigor como para sugerir la certeza del acontecimiento histórico.

“En tal caso, debe dirigirse al Centro Provincial de Patrimonio de Ciudad de La Habana, donde se conformará el expediente, éste transitará a instancias superiores, hasta la Comisión Nacional de Monumentos, siendo ella la encargada de dictaminar y disponer finalmente de la colocación de la placa.”

La especialista Leyva aseguró, no obstante, que el expediente con fines de señalar la casa natal de Varela no ha llegado a la instancia de nivel nacional.

Tampoco al Consejo Provincial de Patrimonio se le ha presentado ninguna solicitud sobre el particular, explica María del Carmen Pérez, funcionaria de dicho organismo. “El caso de la casa natal de Félix Varela jamás ha sido tramitado en nuestra entidad”, aseguró la licenciada.

Otto Rondín, secretario ejecutivo de la Comisión de Monumentos en Ciudad de La Habana, lamenta el poco tiempo dedicado hasta ahora a la búsqueda de la confirmación de un suceso de tanta trascendencia.

“Yo participé en la restauración de la casa unos años atrás. La Oficina del Historiador estaba persuadida del valor del recinto y a ello se debe el nombre de la biblioteca. Quizá el problema será resuelto cuando el Vaticano disponga por fin la canonización del Padre Varela”, sugirió.

La santificación de Varela, si finalmente resultara decidida por la Iglesia Católica, podría ser un factor influyente para la colocación de la tarja necesaria. Sin embargo, más determinante resultaría arribar a una conclusión definitiva sobre el lugar de nacimiento del precursor de nuestra Independencia Nacional, el Padre Félix Varela y Morales. Mientras tanto, bastaría algún tipo de divulgación dirigida al caminante en Obispo, indicándole una de las peculiaridades más significativas del más transitado bulevar habanero.

“El que nos enseñó en pensar…”

Magdiel Rodríguez Almar, un pionero de quinto grado, ya muestra conocer el pensamiento de José de La Luz y Caballero sobre el Padre Varela, mediante el cual lo califica como “el que nos enseñó en pensar”. El niño estudia en la escuela primaria José Martí, situada justo al frente de la Biblioteca Pedagógica. Un trabajo de investigación en su grupo le acercó tiempo atrás a la institución.

“Considero muy importante que las personas conozcan que quizás Félix Varela nació en este terreno, al frente de nuestra escuela. Para mí, él no está muerto, vive mientras alguien estudie sus reflexiones y escritos. A veces, yo creo poder verlo por esa ventana.”

La incógnita en torno al nacimiento del insigne sacerdote continuará presente mientras no se encuentre alguna prueba o documento definitorio sobre el espacio preciso del hecho histórico. No obstante, a pesar de las dudas y conflictos expresados por los expertos en el polémico tema, personitas como Magdiel, y otras no tan jóvenes, insisten en reconocer el valor del sitio y el espíritu del lugar.

Es inamovible el orgullo de Yalile Amado, especialista principal de la Biblioteca Félix Varela,  adscripta a la Oficina del Historiador de La Ciudad de La Habana, demostrado por su modo peculiar de responder las llamadas telefónicas de los usuarios:

-Buenos días, Casa Natal de Félix Varela. ¿En qué puedo ayudarle?

Ficha técnica:

Tema: La polémica sobre el lugar de nacimiento de Félix Varela y Morales, y su posible relación con el terreno ocupado actualmente por la Biblioteca Pedagógica Félix Varela.

Propósito: Desempolvar la polémica sobre la locación de la casa natal del Padre Varela, prácticamente desconocida, a pesar de centrar los hechos sobre el concurrido bulevar habanero Obispo.

Objetivos colaterales: Exponer las distintas hipótesis sobre el terreno donde se situaba la casa natal de Félix Varela, algunas de ellas relacionadas con el actual terreno de la Biblioteca Pedagógica. Demostrar lo prácticamente desconocido que resulta este asunto entre los cubanos. Indagar en el proceso de conformación de una posible tarja para dar a conocer este hecho histórico en la calle del Obispo. Reseñar brevemente la labor de la Biblioteca, como el inmueble de donde parte la investigación.

Estrategia de fuentes:

Directas:

De la Biblioteca:
Sergio González García. Director
Yalile Amado Batista. Especialista principal de la Casa

Historiadores:
Eusebio Reyes. Historiador de la  OHCH (Oficina del Historiador)
Perla Cartaya Historiadora y profesora del Seminario de San Carlos y San Ambrosio
Eduardo Torres Cuevas. Doctor en Ciencias Históricas. Biógrafo de Varela

Del Departamento de Arquitectura de la Oficina del Historiador:
Rosalía Oliva Suárez. Autora de la investigación del Dto Arquitectura sobre la Casa.

De Patrimonio:
Mirna Leyva. Especialista de la Vicepresidencia de Monumentos del Consejo Nacional de Patrimonio Cultural
María del Carmen Pérez. Especialista del Consejo Provincial de Patrimonio
Otto Rondín, Secretario Ejecutivo de la Comisión de Monumentos en La Ciudad de La Habana

Usuarios:
Nelson Davil. Profesor de la Universidad de La Habana
Bibliotecaria del Fondo de Bienes Culturales
Magdiel Rodríguez Almar. Escuela Primaria José Martí. Frente a la Biblioteca Pedagógica Félix Varela

Documentales:

Céspedes, Monseñor Carlos Manuel de. “Pasión por Cuba y por la Iglesia. Aproximación biográfica al Padre Félix Varela”. Biblioteca de autores cristianos. Madrid, 1998.

González, Diego. “El Padre Varela. Su vida y su obra.” Imprenta La Propagandista. La Habana. 1927.

Hernández Travieso, Antonio. “El Padre Varela. Biografía del forjador de la conciencia cubana” Editor Jesús Montero. La Habana, 1949.

Ibarra Cuesta, Jorge. “Varela el precursor. Un estudio de época” Editorial Ciencias Sociales. La Habana, 2008.

Oliva Suárez, Rosalía. “Casa Félix Varela. Obispo No.462” Gabinete de Arqueología de la Oficina del Historiador de la Ciudad de la Habana. La Habana, 2003

Rodríguez, José Ignacio. “Vida del presbítero don Félix Varela” Primera edición. Imprenta “O Novo Mundo” Nueva York, 1878. (Consultado en la Biblioteca Nacional)

Santana, Joaquín G. “¿Quién fue..? Félix Varela.” Ediciones Unión. La Habana, 1982

Torres Cuevas, Eduardo. “Félix Varela”. Editorial Ciencias Sociales. Tercera edición. La Habana, 2002.

Soportes:

Hecho: La polémica existente sobre el lugar de nacimiento de Félix Varela y el desconocimiento de la población.

Contexto: Miles de personas pasan por frente de la Biblioteca Pedagógica Félix Varela a diario sin imaginarse que existe un debate sobre si allí nació el Padre Varela o no.

Antecedentes: Desde la primera biografía de Varela, no se ha podido encontrar algún documento hasta ahora, que especifique el número de la casa donde nació el Padre.

Proyecciones: Existen investigaciones por hacer para asumir una tesis final, y mientras no se demuestre algo más concreto, y se inicien los trámites en las oficinas de Patrimonio, no habrá placa ninguna en el lugar.

Fuentes: Las mencionadas anteriormente

Tipos de juicios:

Analíticos: Los de los tres historiadores citados, y el de la especialista del Gabinete de Arqueología, porque hacen profundos análisis individuales teniendo en cuenta elementos distintos a la hora de valorar la hipótesis sobre el lugar de nacimiento de Varela.  

Sintéticos: El juicio citado de Otto Rondín, de la Comisión de Monumentos, muestra una suposición del futuro, como se agilizará el asunto de la placa cuando se defina la canonización del Padre Varela en el Vaticano.

Hipotéticos: También se pueden calificar como hipotéticos los juicios de los historiadores, porque todos plantean sus hipótesis sobre una misma cuestión.

Disyuntivos: En el acápite del debate sobre el sitio exacto del nacimiento del padre Varela, los juicios, por lo general, son disyuntivos, porque algunos expertos piensan que nació en la locación de la Biblioteca, otros que al lado, etc.

De Valor: Casi todos los empleados. Ya sea para demostrar las distintas hipótesis del nacimiento de Félix Varela, como para explicar el procedimiento de colocar una placa, y la situación específica de la de la Casa Félix Varela; o sea para hablar del trabajo de la biblioteca, o las opiniones de los usuarios. Todos esos juicios son considerados como de valor en el contexto y con la función que se emplean.

Tipo de título: De interrogante
Tipo de entrada: de sumario, de panorama…
Tipo de cuerpo: de bloques temáticos
Tipos de transiciones: Se emplearon palabras claves a repetirse en distintos párrafos para evidenciar que se habla del mismo tema. Ejemplo: casa, investigador, placa, etc.
Se repiten conceptos cambiando los términos, como por ejemplo, dejar de llamar a la casa natal de ese modo, sino con otras expresiones sinónimas
Son utilizadas transiciones como además, sin embargo, por otro lado, etc.
Los subtítulos también constituyen transiciones.
Tipo de cierre: anticlimático.

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