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Isla al Sur

OJOS QUE NO VEN…. ¡BASURA QUE SE ACUMULA!

OJOS QUE NO VEN…. ¡BASURA QUE SE ACUMULA!

La capital vierte anualmente siete millones de metros cúbicos de desechos sólidos, lo cual representa el 36 por ciento del total nacional de este apartado.

Texto y fotos:
JAVIER ROQUE MARTÍNEZ,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.

Cerca de siete millones de metros cúbicos de desechos sólidos son vertidos en las calles de la capital como promedio anual durante la última década, lo cual representa más de la tercera parte del total nacional -36 por ciento-, que asciende a 18 millones 188 mil metros cúbicos por año.

Históricamente La Habana es la provincia del país con mayor índice en este apartado, con números que ponen en duda el cumplimiento  del artículo 147 de la Ley de Medio Ambiente, que prohíbe emitir, verter o descargar sustancias o materiales al aire libre que puedan perjudicar la salud humana o la calidad de vida de la población.

Con el propósito de disminuir el nivel de basura al aire libre en la capital, los Servicios Comunales pusieron en circulación 400 nuevos contenedores durante 2011 y 2012,  priorizando municipios con mayor incidencia como Centro Habana y Habana Vieja.

“Cada uno de estos cestos le cuesta al país 40 CUC y hay quienes los rompen para aprovechar las ruedas o el plástico. Es necesario que la población cuide lo que con tanto sacrificio se consigue, y que al final es para el bien de la comunidad”, explicó Eduardo León, director de la empresa.

“Mi cuadra lleva más de dos años sin contenedor, y en ocasiones el camión  no aparece durante días. Si a esto sumas que los de otras calles están repletos, ¿dónde vamos a verter la basura?, ¿en la casa?”, comentó Yosvany Díaz, vecino de Centro Habana.

Según Pedro Leyva, funcionario de Comunales de ese municipio, el plan de ubicación de los medios se realiza teniendo en cuenta los altos índices de contaminación que presentan barrios como Jesús María, Cayo Hueso, Colón y Pueblo Nuevo, y cuya superpoblación demanda mayor número de unidades. 

“Debemos centrar nuestra atención en dichas áreas para evitar la proliferación de enfermedades como el dengue y otras respiratorias, muy comunes en estos escenarios. Por tal razón, tenemos que disponer de más cestos en algunas zonas que en otras”. 

Debido a las quejas de la población y a la falta de personal, el sector de los Servicios Comunales valora nuevas formas de gestión no estatal para arrendar su equipamiento a personas que se encarguen de la recogida de desechos sólidos.

Ante la posibilidad de esta medida, Juan Morales, barrendero del Vedado durante más de diez años, manifestó que “si es un trabajo bien pagado y está sometido continuamente a revisión por parte de inspectores, pronto se verán mejorías en la limpieza de la ciudad, aunque también deben ser sancionadas las personas que botan basura en cualquier parte; de otra manera, la gente seguirá incumpliendo”.

Organismos como Salud Pública, Comunales y Vectores son los encargados de hacer cumplir las normas establecidas por la legislación, pero ante la falta de respuesta y combatividad de estas instituciones o la excesiva acumulación de quejas, el Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) tiene la potestad de intervenir y aplicar multas a personas jurídicas o naturales.

“Las multas para personas naturales son de 200 pesos, mientras que para los centro laborales comienzan a partir de 2 000 pesos, y pueden ser duplicadas o triplicadas de acuerdo con la gravedad de la violación. Debido a la falta de personal, hacemos un trabajo más profundo en las empresas que con la población”, explicó Bárbara Cordobés Rodríguez, especialista de la Unidad de Medio Ambiente (UMA) de La Habana, aunque el número de sanciones impuestas durante 2012 no se pudo dar a conocer por tratarse de un dato reservado.

Los desechos sólidos provocan la propagación de enfermedades transmitidas por vectores como mosquitos y ratones y otras diarreicas, además de la contaminación del suelo, el aire y el agua, factores que pueden traer serias consecuencias para la salud de la comunidad.

“Solo en el municipio Plaza de la Revolución se registraron en 2012 cientos de casos de dengue, y algunos de cólera y leptospirosis. No se lamentaron muertes, pero hay que crear conciencia  en la gente sobre la importancia de mantener cada rincón de la ciudad limpio”, apuntó la doctora Caridad Morín González, especialista en Medicina General Integral y máster en Enfermedades Infecciosas del policlínico Moncada.

La acumulación de desechos sólidos también puede traer afectaciones a la estética comunitaria. “Si seguimos actuando como si nada, pronto La Habana se convertirá en un enorme basurero. Por doquier vemos cajas y latas y nadie parece preocuparse. ¿Esa es la imagen que queremos dar de  la capital?”, planteó Mercedes Acosta, vecina del municipio Playa.

El Ministerio de Educación es uno de los que más trabajo realiza en pos de educar a las nuevas generaciones sobre la importancia de mantener limpias las calles y aceras. Mediante círculos de interés y actividades extraescolares se incita a los “pinos nuevos” a luchar por una comunidad más limpia y agradable.

“En las aulas se trabaja desde edades tempranas para erradicar malos hábitos como botar  latas de refresco en el piso, pero también necesitamos la colaboración de la familia y los vecinos. Los malos ejemplos están en todas partes y, por desgracia, son los más fáciles de copiar”, señaló Yanet Mederos, directora de la escuela primaria Frank Hidalgo Gato, del Vedado.

Pie de fotos: La Ley de Medio Ambiente penaliza el vertimiento de basura en calles y aceras. Sin embargo, La Habana parece encontrarse al margen de la cuestión.

Ficha Técnica:

Tema: Artículo 147 de la Ley de Medio Ambiente en contraposición a los altos niveles de desechos sólidos en La Habana.

Propósito: Demostrar el impacto negativo y las consecuencias que puede traer para la población la acumulación de desechos sólidos

Objetivos colaterales: Conocer la respuesta de las autoridades, las consecuencias para la salud de los vertederos, afectación a la estética comunitaria, indagar sobre la pérdida de valores y del sentido colectivo.

Estrategias de fuentes: Funcionarios de Comunales, funcionarios del CITMA, doctores, vecinos, profesores.

Soportes a emplear:

Hecho: Aumento anual del por ciento de desechos sólidos en La Habana.

Contexto: La capital produce el 36 por ciento de los desechos sólidos del país, generando cerca de siete millones de metros cúbicos de basura anualmente.

Antecedentes: Estudios realizados por la Oficina Nacional de Estadísticas muestran la tendencia a incrementar de los desechos sólidos en la capital cubana.

Proyecciones: Trabajo pendiente de Comunales para conseguir todos los medios necesarios para la limpieza de la ciudad, arrendamiento de equipamiento de Comunales a personas encargadas de recoger los desechos sólidos, papel de médicos y maestros en la concientización de la población.

Fuentes:

Eduardo León, director de Servicios Comunales.

Pedro Leyva, funcionario de Comunales en Centro Habana.

Bárbara Cordobés Rodríguez, especialista de la Unidad de Medio Ambiente  de La Habana.

Dra. Caridad Morín González, especialista en Medicina General Integral y máster en Enfermedades Infecciosas.

Yosvany Díaz, vecino de Centro Habana.

Mercedes Acosta, vecina de Playa.

Yanet Mederos, directora de escuela primaria Frank Hidalgo Gato.

Referencia documental:

Ley 81 o Ley de Medio Ambiente, artículo 147.

Indicadores seleccionados de Servicios Comunales. Oficina Nacional de Estadísticas.

Tipos de juicios:

Analíticos: Para buscar información concreta sobre la realidad de los desechos sólidos en la capital y el trabajo que realiza Comunales para frenar esta situación.

Sintéticos: Para buscar las causas que llevan a las personas a incumplir con lo establecido por la ley.

De valor: Para conocer los organismos que pueden multar a personas e instituciones que incumplen con la Ley 81, posibles consecuencias para la salud, repercusión en la estética comunitaria.

Tipo de título: Llamativo.
Tipo de lead: Especial de Impacto.

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