¿REGGAETÓN CRISTIANO?

Actualmente, algunas corrientes religiosas adoptan manifestaciones culturales de extensión popular para ampliar su aceptación en las masas y transmitir sus doctrinas.

Texto y foto:
ARIEL PAZOS ORTIZ,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.

Miembros de la Casa Apostólica y Profética Vino Bueno dramatizaron sus argumentos a partir de varias canciones de reggaetón añadiéndoles letras de contenido religioso, el pasado sábado 18 de octubre (2014) en la calle Obispo, donde concurrieron decenas de personas.

“Tenemos una misión: ir y predicar el Evangelio. No estamos en contra de ningún tipo de música, siempre que el mensaje sea digno, y si con ella podemos transmitir la palabra del Señor, es bienvenida”,  comentó Yaser Avat, miembro y líder religioso de la Casa Apostólica y Profética Vino Bueno, con sede en la habanera localidad de Alamar.

A su vez, Camilo López, activista de la institución religiosa, afirma que forma parte del grupo desde hace cuatro años: “La letra la escribimos nosotros mismos. Organizamos algunos números culturales acompañados de reggaetón y salimos casi todos los fines de semana a algún lugar de La Habana para mostrar a la gente la necesidad de conocer y aceptar a Dios. De esta forma también predicamos en la sociedad”.

Al respecto, la profesora de la Facultad de Comunicación de la Universidad de La Habana, Gladys Hernández, especialista en Desarrollo y Sociedad, señala que a través de la historia algunas instituciones religiosas asimilaron las transformaciones sociales y se han valido de los nuevos recursos comunicológicos para llegar a las masas.

“Considero que es provechoso para sus fines. Con esos procedimientos pueden ampliar su público entre los jóvenes y ganar adeptos. Es lógico que evolucionen a la par de la sociedad”, agregó Hernández.

Por otra parte, el Máster en Comunicación Social y profesor del mismo centro, Dasniel Olivera, afirmó que la disposición de incorporar formas de expresión cultural contemporáneas al medio relioso es un fenómeno de antaño en no pocas vertientes.

“La Iglesia Protestante, por ejemplo, por sus propias particularidades, se caracteriza por asimilar con relativa facilidad las tendencias socio-culturales que en un momento histórico podrían parecer demasiado modernas o liberales con respecto a estereotipos más tradicionales”, explicó.

Además de la Protestante, existen otras iglesias que también son propensas a retroalimentarse del desarrollo cultural de las sociedades en que coexisten. Años atrás sucedió con el  rock, que fue aceptado por algunas variantes religiosas.    

“Resulta interesante que un género musical, en la cotidianidad marginalizado y visto desde perspectivas predominantemente  comercialistas, pueda ser empleado en la prédica religiosa, pero no significa que la idea tenga que ser soslayada. Tienen todo el derecho de valerse de este medio y fusionarlo convenientemente con sus doctrinas, a pesar de que existan corrientes más conservadoras que se opongan”, concluyó Olivera.

Pie de foto: “El evangelio cambia” fue la prédica fundamental de un grupo artístico-religioso que coreografió temas de reggaetón a un costado del Convento de San Gerónimo, en la Habana Vieja.

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