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Isla al Sur

CON LA ADARGA AL BRAZO

CON LA ADARGA AL BRAZO

LESLIE ALONSO FIGUEROA,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.

Ingresar a la Universidad es de las sensaciones que esperan experimentar todos los jóvenes aspirantes a una carrera desde el preuniversitario. ¿Resultará sencillo enfrentar el primer año de estudio de la profesión que escogiste?

El comienzo siempre atemoriza, los principios te ponen en la disyuntiva de si lo lograrás, el cambio no se asimila con facilidad, la Universidad es una enseñanza distinta a las precedentes, es un mundo por explorar, es una experiencia para la vida.

El primer año universitario significa para algunos el desprendimiento del hogar; para otros la separación de los amigos de tres años de beca; la convulsa aceptación de la capital para los provincianos; la asimilación de nuevos profesores, carentes del paternalismo de los de años anteriores; la avalancha contra el bolsillo de los padres porque aumentan las necesidades y con ellas el estrago económico.

Este comienzo permitirá que decidas si quieres graduarte en la profesión que escogiste; si no erraste en la selección; si resistirás incansables noches de estudio, el rechazo a decenas de fiestas, la aceptación de nuevos amigos, distintos a los del pre, más maduros y no sabemos aún, si por ende, menos consagrados a la amistad.

Para los que vivirán durante cinco años en una beca este comienzo los hará apreciar la singular estancia en una residencia estudiantil, los días de limpieza, las noches con hambre, la añoranza por la casa y el calor humano, difícil de encontrar, pero cuando se halla es para toda la vida.

Los primeros meses no resultarán sencillos, dos largos períodos de exámenes finales romperán con tu fija idea de que un curso termina en julio y durante todo el año estás recibiendo las mismas asignaturas; ahora se llamarán semestres, y cada uno mostrará perfiles distintos de la profesión.

Los certificados médicos con los que tantas ausencias justificaste ya no servirán de mucho, si no cumples el porciento de asistencia a clases estás invalidado, solo a través de la revalorización conseguirás vencer la materia.

Las cientos de tesis discutidas al finalizar cada curso escolar son las más verídicas muestras de todos los que consiguen resistir esta larga batalla de cinco años. Quejarse solo debilitará la resistencia, emprender el camino será la arrancada para los que recién culminan sus exámenes de ingresos.

Hoy daré un consejo que aprehendimos de los grandes de la música, de los Beatles, todo en el mundo se mueve por amor, si la carrera que escogiste es la que realmente te apasiona ni el más convulso de los primeros años logrará detenerte. Solo debes, con la adarga la brazo, emprender la batalla.

 

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