NUEVOS APORTES A LA FLORA CUBANA

Estrella cubana, Rumbera oriental, Tropical Classic y Sabrina & Abel son los nombres de los últimos híbridos de orquídeas creados en Cuba.

ALIANET BELTRÁN ÁLVAREZ,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana. 

La Real Sociedad Hortícola de Inglaterra, máxima institución encargada del registro de híbridos de orquídeas, incluyó en la Lista de Sander´s entre el 2013 y el presente año cuatro nuevas especies únicas en Cuba y el mundo, que logró Lorenzo Suárez Guerra, especialista en ingeniería agrícola del Instituto Nacional de Ciencias Agrícolas (INCA), en la provincia Mayabeque.

Según el informe enviado a la sociedad, entre las nuevas orquídeas se encuentra “Estrella cubana” (Brassolaelia), planta que se logra en los árboles o soportes naturales con flores de tamaño variable entre los 10 y 12 centímetros de diámetro. Es de color blanco con una mancha negra hacia el interior. Debe su nombre a la forma que tiene y, además, porque fue lograda en Cuba.

La “Rumbera oriental” (Encyvola) tiene flores que oscilan entre los ocho y 12 centímetros de diámetro. Es de color rosado con puntos de tonos más fuertes sobre las piezas florales. El origen de su nombre se debe a que una de las plantas utilizadas para su creación es autóctona de la zona oriental.

Para homenajear a los sobrinos de Lorenzo Suárez Guerra surge la “Sabrina & Abel” (Spathoglottis), híbrido terrestre con flores entre los 5 y 5.5 centímetros de tamaño, predominantemente amarillas, aunque sus bordes son totalmente rosados.

Numerosas flores de coloración rosa moteada en blanco con un diámetro entre los 6 y 6,5 centímetros de tamaño presenta la Tropical Classic (Dendrobium), debido a su gran árbol genealógico obtiene el apellido Classic y debe su nombre a la región donde se cultiva. 

“Para seleccionar el padre y la madre (parentales) escojo una planta con flores grandes y otra con colores vistosos, en busca de obtener un híbrido con ambas características. Y si cuento con alguna donde la cantidad de flores es escasa la polinizo con otra que las tenga en abundancia”, comentó el Máster en Ciencias Lorenzo Suárez Guerra.

Por su parte, Georvis Téllez Beltrán, técnico agrónomo especializado en la mejora genética, explicó que el ingeniero lleva al laboratorio varios bulbos extraídos de las plantas que han pasado el proceso de hibridación. Luego, las semillas son desinfectadas y “plantadas” en pomos que contienen las mismas sustancias que el suelo, pero con componentes hormonales.

Durante el período de entre 7 y 18 meses las semillas pasan por diferentes etapas: iniciación -donde comienzan a germinar-, le sigue la multiplicación –son separadas para aumentarlas en número-, enraizamiento -la planta echa raíces- y la climatización -adaptación de esta al medio natural-.

Juan Gualberto Castillo Hernández, jefe del Centro de Genética y mejoramiento de las plantas, aseguró sentirse orgulloso de que los híbridos hayan sido creados en la institución porque contribuyen al desarrollo económico del país, estas orquídeas poseen un alto valor exportable.

Lorenzo Suárez comenzó con el proceso de hibridación de orquídeas en el 2002 y tiene hasta este año registrados 12 tipos diferentes, con el récord de haber creado uno por año.

Ficha técnica:

Tipo de título: Genérico.
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Fuentes: Empíricas, no documentales y documentales