TESTIGO DE LA EVOLUCIÓN UNIVERSAL
Escondido entre mogotes y montañas de Viñales, en la provincia de Pinar del Río, el Mural de la Prehistoria es una representación de algunas de las criaturas que habitaron la región hace millones de años.
Texto y foto:
EDILMARYS AJETE NARANJO,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.
El Mural de la Prehistoria, ubicado en el Valle Dos Hermanas del Parque Nacional de Viñales, está cumpliendo 51 años de concluida la obra estética y 16 de declarada por la UNESCO como Paisaje Cultural de la Humanidad.
Considerado uno de los mayores frescos a cielo abierto del planeta, como refleja el artículo publicado el 30 de septiembre de 2009 en el periódico Juventud Rebelde, el mural está dibujado sobre rocas calizas que datan del período jurásico y exhiben una representación del pasado de la región. En él se aprecian las figuras de los aborígenes pertenecientes a la tribu Guanahatabeyes y las imágenes de criaturas milenarias ya desaparecidas como el oso gigante, algunos moluscos y dinosaurios.
“La pintura está compuesta por 12 piezas, mide 120 metros de alto por 80 de ancho y posee un sistema de drenaje que evita la acumulación de agua entre las piedras y contribuye a su conservación. La impresionante obra es uno de los principales sitios de interés de la ciudad y nuestro país”, expresó Ricardo Álvarez Pérez, historiador de la localidad pinareña de Viñales.
La idea de realizar una obra que reflejara la vida de nuestros aborígenes tuvo gran aceptación cuando el Doctor Antonio Núñez Jiménez la propuso a Fidel Castro y Celia Sánchez en el año 1959 y el 11 de septiembre los lugareños comenzaron a eliminar la escasa vegetación de la ladera escarpada donde se iba a realizar la pintura.
El pintor cubano Leovigildo González, discípulo del muralista mexicano Diego Rivera, junto a un grupo de campesinos del lugar comenzó a trabajar en la pieza en marzo de 1960. Utilizaron arneses de paracaídas y andamios hechos con sogas y madera mientras el artista los guiaba desde abajo con un megáfono y binoculares. El proceso terminó cuatro años más tarde con el resultado que se aprecia hoy.
“Viñales es un pueblo interesante, embruja a quien lo visita. El mural es una impresionante muestra de nuestra cultura, ayuda a recordar lo singular de lo que tenemos y no apreciamos porque el panorama turístico nubla un poco la visión de lo realmente importante”, señaló Alfredo Galiano Rodríguez, residente en la localidad.
La restauración del dibujo la realizan cada cinco años y para ello utilizan materiales resistentes a la erosión y a la actividad de los fenómenos atmosféricos que afectan a nuestro país debido a su ubicación geográfica.
A la cima de la montaña donde está ubicado puede accederse a través de un sendero en el lado derecho, para apreciar la belleza del valle que lo rodea.
Pie de foto: El Mural de la Prehistoria muestra los primeros habitantes de nuestra isla en interacción con la naturaleza.
Ficha técnica:
Tipo de Título: Genérico.
Tipo de Lead: Sumario de Qué.
Tipo de cuerpo: Lead + Pirámide Invertida + Dato Adicional.
Tipos de fuentes: Directas (Ricardo Álvarez Pérez, historiador de Viñales, y Alfredo Galiano Rodríguez, residente de la localidad pinareña). Documental (Artículo publicado en el periódico Juventud Rebelde el 30 de septiembre de 2009).
Primer valor-noticia: Singularidad.
Otros valores-noticia: Prominencia y Proximidad.
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