MERCURIO A MERCED DEL VIENTO
La escultura ubicada en la cúpula de la Lonja del Comercio de La Habana, cumple 12 años desafiando al viento gracias a la eficacia de un mecanismo giratorio.
DANIELA HERNÁNDEZ GARI,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.
El Dios del Comercio no se conforma con observar el Cristo de La Habana o la Plaza de las Palomas. Rota al compás de un delicioso viento que no llega a los pobres mortales. La única estatua giratoria de Cuba, ubicada en el punto más alto del emblemático edificio Lonja del Comercio de la capital, varía su posición gracias a un sencillo sistema mecánico, modificación condicionada por su caída durante el huracán Irene, el 14 de octubre de 1999.
Durante los primeros meses del 2000, un equipo multidisciplinario de la Oficina del Historiador de La Habana, en colaboración con la Facultad de Mecánica del Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría (ISPJAE), analizaron las causas del desplome y decidieron que la emblemática escultura se moviera lentamente debido a su propia masa.
El Doctor Carlos Novo, Vicedecano Docente de la Facultad de Ingeniería Mecánica, en conjunto con el ingeniero Reinere Hernández, gerente técnico de la Lonja del Comercio, y Orestes del Castillo, Doctor en Ciencias Técnicas, concibieron la idea de un mecanismo giratorio con un rodamiento especial que se ajustara a las condiciones y medidas específicas de la escultura.
Según datos ofrecidos por planos y documentos pertenecientes a los archivos del proyecto Mercurio, se adquirió un tubo de acero altamente anticorrosivo, la corona giratoria, encargada a la empresa Jost, y contrataron al profesional que tuviera las condiciones necesarias para reparar una estatua de tal magnitud.
Orestes del Castillo agregó que a finales del 2001, la estatua se trasladó al taller Doña Eutimia, en el Callejón del Chorro, para ser restaurada por el difunto escultor Martínez Calá, autor del monje que se encuentra frente al céntrico hostal Los Frailes.
"La reconstrucción y mantenimiento de la escultura se prolongó más de lo esperado, debido a los daños sufridos durante la caída. Basta con decir que estaba dividida en tres partes cuando llegó al taller de Calá", comentó el arquitecto y Doctor en Ciencias Técnicas.
El recién reparado Mercurio se instaló nuevamente en abril del 2002 y ese mismo año enfrentó la furia del huracán Lily. A pesar de las ráfagas de viento superiores a los 100 km/h, el mecanismo giratorio demostró su efectividad al rotar de forma rápida, pero constante.
El gerente técnico de la Lonja del Comercio enfatizó que no era recomendable subir la estatua en esa época del año, los vientos eran muy fuertes, pero los consultores advirtieron que las ráfagas empeorarían en el transcurso del verano y no podían colocarla bajo el riesgo de temporada ciclónica.
En la actualidad, el proyecto Mercurio es considerado una proeza de la ingeniería y arquitectura cubanas, ya que demostró la eficacia de los mecanismos giratorios para las estatuas ubicadas en cúpulas o lugares extremadamente altos.
Pie de foto: Colocado en 1909, el Dios del Comercio sufrió dos caídas en el pasado, de las cuales, sólo una está documentada.
Ficha Técnica:
Tipo de título: Llamativo.
Tipo de lead: Especial de Ambiente.
Tipo de cuerpo: Lead + Pirámide normal modificada + Dato adicional.
Tipo de información: Ligera, blanda, afirmativa, simple, fuente directa, hecho consumado.
Tipo de fuentes: Documentales y no documentales, tradicionales, transitorias, primarias, directas e indirectas. Directas: Orestes del Castillo, arquitecto y Doctor en Ciencias Técnicas y Reinere Hernández Gari, ingeniero eléctrico y gerente técnico de la Lonja del Comercio. Documentales: Documentos y planos ofrecidos por las fuentes directas en nombre de la institución antes mencionada.
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