Blogia
Isla al Sur

UN GIGANTE EN MINIATURA

UN GIGANTE EN MINIATURA

El cronista de las curiosidades, Luis Hernández Serrano, lleva más de cuarenta años consagrado al “oficio más hermoso del mundo”, desde las páginas de Juventud Rebelde.

Texto y foto:    
JUNIOR ALFREDO HERNÁNDEZ CASTRO,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación.
Universidad de La Habana.

Un joven de 22 años, estatura pequeña y risueño, fue el único cubano que integró la brigada china de cortadores de caña voluntarios en la década de 1960. Media centuria ha pasado desde entonces, pero aún recuerda con júbilo a sus amigos Yang Su Tieng y Chang Hung Fa, y tararea, hasta con ritmo de conga, una melodía que le enseñaron los camaradas orientales, titulada “El socialismo es bueno”.

Se trata de Luis Hernández Serrano, periodista de Juventud Rebelde y autor de unos 4 000 trabajos, quien le dice entre sonrisas a un estudiante que tenía intención de entrevistarlo: “Pregunta lo que desees, contestaré lo que yo quiera”.

La música fue una de sus pasiones durante la adolescencia, pero la cambió por la cartilla de la alfabetización en 1961. Regresó a La Habana un año después y, tras de cursar el bachillerato, no sabía si elegir Medicina, Historia o Pedagogía. El amor por las letras, las ansias de investigar, y la experiencia vivida mientras enseñaba a leer y escribir, hicieron que finalmente se decantara por Periodismo.

Graduado en 1974, narra anécdotas que han marcado a disímiles generaciones de cubanos, pasajes de la tradición nacional difuminados tras el velo del tiempo y hechos singulares que parecen estar incluidos en una novela de ciencia ficción. “Soy un hombre cuya vocación es redactar, conmigo nació ser periodista”, comenta.

A pesar de las no pocas desilusiones en su carrera –centenares de trabajos sin publicar y más de una docena de libros inéditos- y el fallecimiento de seres queridos, sigue manteniendo la sonrisa indeleble y el sentido del humor intacto. Es uno de los pocos reporteros que fusiona en sus escritos la información atrayente con la picardía y frescura propias del cubano.

Guarda en la memoria una frase dicha por el padre poco antes de morir, y que lo marcó para el resto de su vida: “Con todo lo que tengo arriba, todavía me río”. Hace una pequeña pausa, como si rememorara aquel momento, y continúa: “No puedo dialogar constantemente en serio. Tengo que charlar en serio, pero también debo hacerlo en broma”.

Se detiene nuevamente, puesto que un mosquito no cesa de incomodarlo y, después de dar enérgicos -pero imprecisos- manotazos al aire, añade: “Una vez alguien me dijo: «Compadre, tú tienes que escribir como hablas. Si lo haces, verás qué bien resultará». Soy un jodedor cubano platicando, también componiendo. Intento ser lo más ameno posible. Si conversas de una forma gustosa y redactas de manera agradable, quienes te oyen, siempre querrán escucharte; y quienes te leen, querrán hacerlo aún más”.

Descubrir hechos novedosos y extraordinarios es una de sus adicciones. Así lo confirman los cientos de trabajos de corte inédito. El cronista de las curiosidades fue quien dio a conocer que un pescador habanero encontró la bandera del acorazado Maine, que Fidel Castro practicó tiro con una escopeta de Ernest Hemingway, y que en la guerra hispano-cubano-norteamericana hubo un súbdito del Zar ruso.

Ganador de numerosos concursos periodísticos y nominado al Premio Nacional de Periodismo “José Martí” 2014, confiesa que con el mero hecho de “arrojar un poco de luz en el camino” se siente feliz.

Al medio siglo de vida arribó el diario de la juventud cubana el pasado 21 de octubre y “Luisito” Hernández, como lo llaman sus amigos, ha sido fiel al periódico durante más de cuarenta años: “Tengo proyectos como si fuera a vivir mucho tiempo. Ya cuento con setenta y dos veranos, pero en el interior me he sentido siempre como un joven. Soy entusiasta, iluso y optimista en todo momento. Creo que me voy a morir así.”

Pie de foto: Luis Hernández Serrano es uno de los más representativos periodistas del diario Juventud Rebelde.

0 comentarios