Blogia
Isla al Sur

CON TINTA DE HISTORIA

CON TINTA DE HISTORIA

El Museo-Casa Juan Gualberto Gómez conserva un tintero con una procedencia singular.

VERÓNICA ALONSO CORO,
estudiante de primer año de Periodismo,
Facultad de Comunicación,
Universidad de La Habana.

A 117 años del encarcelamiento del patriota cubano Juan Gualberto Gómez en Ceuta, colonia española en África, el Museo-Casa que lleva su nombre, sito en Compostela 359 en la Habana Vieja, guarda el tintero construido con los grilletes que usó en aquella ocasión.

La familia de Juan Gualberto donó a la institución el objeto, hecho de hierro y cristal, en el año 1987. Leisbel Rodríguez, museóloga del centro, afirmó que este tintero es uno de las muestras más preciadas que guarda la casa, es una pieza de la que se está orgullosa de tener bajo su responsabilidad.

La historia del tintero se remonta a la década del noventa del siglo XIX. El 12 de octubre de 1995 Juan Gualberto Gómez fue desterrado a España por organizar el alzamiento de Ibarra en febrero de ese mismo año. Al llegar a Ceuta, ciudad del norte de África, le fueron colocados en los pies unos grilletes unidos por una triple cadena.

La condena del patriota era de veinte años en la cárcel y, a su llegada, fue confinado a los llamados Pabellones Militares en los pisos inferiores de la prisión. Arrastró las cadenas por aproximadamente un mes cuando le fueron retiradas por gestiones de un carcelero con el que creó gran empatía.

Decidió, entonces, comprar los grilletes y convertirlos en una pistola con cabo de nácar y un tintero con el que escribiría muchos de los trabajos publicados por él en el periódico La Fraternidad y la Igualdad que se conserva hoy en el museo.

Su biznieta cuenta que en su segunda estancia en Ceuta, Juan Gualberto se convirtió en una especie de jefe de los presos políticos y que incluso sirvió de testigo en la boda de la hija de un carcelero.

0 comentarios