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ALGO MÁS QUE LATINOS EN EL BÉISBOL

ALGO MÁS QUE LATINOS EN EL BÉISBOL

El autor estadounidense James Cockcroft analiza la historia de los hispanos y afronorteamericanos en la pelota de grandes ligas teniendo en cuenta el contexto social de cada época a la que se hace referencia.

Texto y foto:

JORGE LUIS COLL UNTORIA,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Latinos en el béisbol es uno de los más de 20 títulos del autor estadounidense James Cockcroft, profesor de la Universidad Estatal de Nueva York e historiador con cierta inclinación hacia temas políticos.

Cockcroft ha desarrollado una amplia producción de trabajos relacionados con la situación y el contexto latinoamericano en distintas épocas y el presente volumen no es la excepción, a través de la historia de este deporte en Estados Unidos el escritor logra reflejar la dura vida de los emigrantes y afronorteamericanos en la primera potencia mundial desde el siglo XIX.

La discriminación, el racismo y la explotación son varias de las aristas tratadas en la investigación, las cuales se combinan con las experiencias de grandes peloteros hispanos y leyendas de este pasatiempo en las ligas mayores, para atrapar al lector en cada una de las casi 200 páginas de contenido.

Reeditado en el 2005 por la Editorial de Ciencias Sociales, en lo que constituyó una edición exclusiva para Cuba, el texto del ensayista americano es el fruto de una amplia indagación apoyada en recursos como las mudas temporales, argumentos de autoridad y narraciones en primera y tercera persona con un narratorio marcado que, de cierto modo, inserta al receptor en la obra.

El material cuenta con nueve capítulos que abordan temas como los orígenes del béisbol, las primeras apariciones de deportistas negros y mestizos –la mayoría de ellos cubanos-, la segregación, las ligas del Caribe y el papel de la Revolución Cubana en la eliminación del profesionalismo.

Además, destaca los aportes técnico-tácticos de los latinos en jugadas como el hit and run –bateo y corrido- y el robo de bases, y comunica que la pelota podía constituir una especie de fuerza social, vista como una manera de derrotar a los Estados Unidos aunque fuera en un juego.

El historiador muestra el maltrato de una forma singular, con diversidad de fuentes, y deja claro cómo los abochornados –los no “blancos”- fueron quienes mantuvieron vivos los estadios durante el período de la gran depresión (1929-1933) y cómo muchos de los hispanos y afronorteamericanos que lucharon en la Segunda Guerra Mundial luego eran despreciados.

Asimismo, refleja el oportunismo y las barreras existentes en una actividad de blancos, los cuales no tuvieron la oportunidad de disfrutar de atletas estelares solo porque eran negros, sin importar cuánto batearan o si eran buenos o malos.

Las hazañas de jugadores como Jackie Robinson, Adolfo Luque, Rube Foster, Satchel Paige o Roberto Clemente resultan atractivas, pues se pone de manifiesto la valentía y perseverancia de estos hombres, quienes en ocasiones tenían que soportar insultos dentro y fuera del terreno, pelotazos y amenazas de muerte.

James Cockcroft, fundador de la Red de redes de intelectuales, artistas, y movimientos sociales en defensa de la humanidad, en alusión a la segregación todavía existente, expresa: «Si el béisbol de las grandes ligas ha de perdurar “para siempre”, entonces también el racismo que prevalece en los Estados Unidos tendrá que ser arrancado de raíz para siempre».

Este libro, similar a América Latina y Estados Unidos: historia y política país por país y otros títulos de este escritor, plasma -a través del deporte en este caso- la explotación, el negocio y las políticas capitalistas. Judíos, afronorteamericanos y mujeres tienen su espacio en el texto, el cual resultará interesante para quienes lo lean, pues Cockcroft, de una forma diferente, nos trae algo más que Latinos en el béisbol.

Pie de foto: Los jugadores latinos han marcado pauta en el béisbol de grandes ligas.

 

CRÓNICA DE UNA GRANDEZA ANUNCIADA

CRÓNICA DE UNA GRANDEZA ANUNCIADA

La novela de Gabriel García Márquez, Crónica de una muerte anunciada, publicada en 1981, fue la antesala del mayor lauro obtenido por el escritor colombiano un año después: el Premio Nobel de Literatura.

LIZ CONDE SÁNCHEZ,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Gabriel García Márquez ya había escrito su obra más conocida, Cien años de soledad, cuando sacó a la escena pública Crónica de una muerte anunciada. Sin embargo, no quedó lejos de su maestría literaria este relato, que tuvo como rasgo principal la realidad de su argumento, en lugar de la ficción característica de otros textos del autor.

Crónica de una muerte anunciada es una novela corta publicada por primera vez en 1981 y reeditada en 2007 por la Editorial colombiana El Mundo. Está inspirada en un suceso real ocurrido en 1951 en la tierra natal del autor, Aracataca, quien apoyado en investigaciones y testimonios referentes al acontecimiento, lo reconstruyó minuciosamente.

En un pequeño pueblo de la costa colombiana, se casan Ángela Vicario y Bayardo San Román. Pero, en la noche de bodas, el novio descubre que ella no es virgen y la devuelve a su familia, la que obliga a la novia a confesar quién ha sido el causante de su deshonra. Ángela, queriendo proteger al culpable, dice el nombre de Santiago Nasar, un joven rico descendiente de árabes muy querido en el barrio.

Los hermanos de Ángela, Pedro y Pablo Vicario, tienen que limpiar la honra de la hermana y vengar el ultraje. Cada uno con un cuchillo en mano sale en busca de Santiago Nasar, quien es amigo de ambos. Sin embargo, los Vicarios toman tal decisión por los tabúes sociales que le imponen pagar la afrenta, pero en realidad no desean hacerlo.

El propio narrador declara en el texto: “Nunca hubo una muerte tan anunciada”. Los vengadores acuden a donde saben que no van a encontrar a Nasar, divulgan a viva voz sus intenciones por todo el pueblo, intentan propiciar la fuga o la detención de Santiago, arman un espectáculo público para que alguien les impida cometer el crimen, pero una serie de fatales casualidades hace que nadie pueda intervenir a tiempo para evitar la tragedia finalmente consumada.

Veintisiete años después, el narrador, presentado en primera persona como testigo, relator e investigador de esos hechos que vivió de cerca, reconstruye detalladamente la historia de un modo detectivesco y realista, pues no solo muestra la versión de los sucesos desde su experiencia, sino también desde los argumentos de los demás personajes.

Uno de los “ganchos” que presenta esta novela para atraer el interés de los lectores es que el cronista no oculta en ningún momento su desenlace, anunciado desde el mismo comienzo de la obra con la frase: "El día en que lo iban a matar, Santiago Nasar se levantó a las 5.30 de la mañana..."

Pese a anunciar el final desde la primera oración, el autor logra mantener al lector en atención durante toda la trama, pues sólo en el último episodio se llegan a comprender las fatales casualidades que condujeron a un crimen fácilmente evitable. Esta es precisamente una de las virtudes de Gabo en la obra.

El narrador presenta a la novela con confusión en cuanto a los testimonios que cuentan otros testigos de la tragedia, y emplea un lenguaje marcado entre lo periodístico y lo literario, elementos con los que logra la credibilidad de las casualidades inimaginables que marcaron Crónica de una muerte anunciada desde el comienzo.

Gabriel García Márquez (1927-2014), más conocido como Gabo, fue un destacado escritor, novelista y periodista colombiano. Se considera uno de los máximos exponentes del llamado realismo mágico y fue el autor de Cien años de soledad (1967), obra maestra de la literatura hispanoamericana y universal de todos los tiempos. Obtuvo el Premio Nobel de Literatura en el año 1982. Escribió otros libros como El coronel no tiene quien le escriba (1961), El otoño del patriarca (1975) y El amor en los tiempos del cólera (1985).

Pie de foto: Crónica de una muerte anunciada fue llevada al cine en 1987 por el cineasta italiano Francesco Rosi (Foto tomada de cronicadeunamuerteanunciada.net).

HÉROES DEL DIAMANTE

HÉROES DEL DIAMANTE

El alma en el terreno. Estrellas del béisbol, recoge 17 entrevistas publicadas en el diario Juventud Rebelde por Leonardo Padura y Raúl Arce.

Texto y foto:

KARINA RODRÍGUEZ MARTÍNEZ,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Cuando hablamos de béisbol en Cuba nadie queda fuera de emitir aunque sea un pequeño comentario al respecto. Los nacidos en esta isla sienten la pelota en la sangre, y uno de los grandes aficionados al deporte nacional es el escritor y periodista Leonardo Padura, quien, junto a la colaboración del reportero Raúl Arce, escribiera El alma en el terreno. Estrellas del béisbol, publicado por la Editorial Abril en 1989, y reeditado por Ediciones Extramuros en 2014.

El proyecto surge desde el cubículo de Deportes, en Juventud Rebelde. Padura siempre tuvo el sueño de entrevistar a los peloteros cubanos más admirados y queridos por el pueblo. La idea vio la luz con la asistencia de Arce, encargado de esta especialización en el diario. Ambos periodistas tenían dos misiones esenciales: hacer que las ediciones dominicales del periódico resultaran atractivas y demostrar que en Cuba se podía hacer un periodismo diferente. 

Si bien el destino inicial de los trabajos fueron las páginas del diario, luego se convirtieron en una propuesta literaria que aglutina 17 entrevistas realizadas entre 1984 y 1987 a algunos de los más sobresalientes jugadores del béisbol, desde antes del triunfo revolucionario hasta la década de 1980. En el libro se recoge la vida de hombres de la talla de Pedro Chávez, Manuel Alarcón, Félix Isasi, Agustín Marquetti y el meteoro de Cuba, Braudilio Vinet.

La entrevista son de personalidad, tienen un toque de opinión, porque en cada una se vuelven recurrentes interrogantes relacionadas con la diferencias entre el béisbol actual y el que jugaban los peloteros, sobre la calidad de los managers y el reglamento a seguir.

Resulta interesante la variedad de entradas que se utilizan, desde las de resumen o típicas, pasando por las retrospectivas y con algunas anecdóticas y biográficas. La titulación de cada entrevista se corresponde con el aspecto significativo por el cual es reconocido el pelotero, acompañado de su nombre. Por ejemplo: “La dialéctica, los jonrones y otras cosas”, referido a Don Miguel Cuevas, nos trasmite la idea de un hombre para el cual «Un jonrón es como la satisfacción del deber cumplido».

Los entrevistadores controlan el diálogo y nos ofrecen al desnudo el alma de estos ídolos del pueblo que hicieron temblar los corazón de miles de fanáticos. Los llevan a develar sus mayores miedos en el campo de juego, cuáles serían los defectos más grandes que pudiera tener un pelotero y con quiénes se sentían cómodos trabajando.

En el prólogo titulado “Un libro en Extraining”, del propio Padura, deja ver las intenciones de ambos periodistas al crear la obra: «Si en algo pudiera ayudar la reedición de estas entrevistas, sin duda estaría en la asimilación de este mensaje, en el espejo que puede colocar ante el presente del béisbol un pasado no tan lejano, cuando estos hombres competían por sus planteles locales y por el equipo nacional, derrochando coraje, entrega, inteligencia. En cuatro palabras: ganas de jugar pelota».

El alma en el Terreno no alcanzó el mismo reconocimiento que otras obras escritas por Leonardo Padura, como las novelas policíacas sobre el detective Mario Conde y El hombre que amaba a los perros, junto con El viaje más largo.

Entre los lauros obtenidos a lo largo de la carrera de este escritor y guionista se encuentran los premios de Crítica Literaria en las ediciones de 1985 y 1988 del Concurso “26 de Julio”, de la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), y el premio Mirta Aguirre 1985, en la categoría de Artículo, otorgado por el Ministerio de Cultura.

Pie de foto: El alma en el terreno. Estrellas del béisbol, es una propuesta publicada por Ediciones Extramuros en 2014.

ANDANDO CON CABALLEROS

ANDANDO CON CABALLEROS

El nuevo libro de Luis Hernández Serrano recoge 31 entrevistas realizadas a caricaturistas, fotógrafos, diseñadores, dibujantes y camarógrafos.

Texto y foto:

ANDY JOSÉ RIVERA GÓMEZ,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.           

Caballeros Andantes es la nueva propuesta literaria que nos ofrece Luis Hernández Serrano, reportero del diario Juventud Rebelde, bajo el sello editorial Pablo de la Torriente, La Habana, 2015.

La obra tiene un importante valor, pues constituye un reconocimiento a la labor, en ocasiones desconocidas, de los profesionales de la comunicación. Los periodistas se encargan de contar la historia de todos, pero no las suyas propias, y Hernández Serrano intenta homenajear y reconocer a estos ilustres personajes de la prensa cubana.

El diseño de la portada no es el más indicado ante tal propuesta. El elemento que asemeja a los caballeros andantes, es decir, el jinete, no tiene la mejor calidad. La imagen es borrosa y hay que fijarse detenidamente en el detalle de la lanza, que es la única alusión a la labor periodística. Una buena portada se caracteriza por la sencillez y la claridad del mensaje que se desea transmitir.

El título es bastante acertado, pues Caballeros Andantes hace referencia a un calificativo que le diera el fallecido Guillermo Cabrera Álvarez a “quienes decidieron escribir, diseñar, dibujar y tirar fotos para periódicos, revistas, televisión y cine”, según el propio autor afirma en el ejemplar.

Serrano tiene publicados nueve libros y en esta oportunidad presenta un material que recoge 31 entrevistas, publicadas en Juventud Rebelde. La propuesta tiene gran calidad en cuanto a las personalidades entrevistadas. Figuran en el libro personalidades de la talla de Juan Emilio Friguls, José Alejandro Rodríguez, Luis Sexto y Marta Rojas.

El prólogo, “Anuncio sin-cero y con ceros”, resulta ingenioso y bastante ilustrativo del mensaje que el autor quiere transmitir. En él se hace un recuento de los principales temas y figuras que se exponen en el texto. El humor, rasgo característico del periodista, está durante todo el libro y resulta una buena presentación, original y con un toque picaresco.

Las entrevistas contienen una valiosa información sobre el periodismo en la época revolucionaria en Cuba. Algunas son de opinión y giran en torno a la labor periodística, donde los protagonistas dan sus puntos de vista acerca de la profesión.  Están compuestas con cierta dosis de ironía, angustia, y un marcado amor y respeto hacia la profesión. Las restantes son cuestionarios dirigidos a develar la personalidad de los encuestados, se centran en su quehacer no solo como comunicadores, sino también en sus experiencias personales.

El autor estudió Artes y Letras en la antigua Facultad de Humanidades de la Universidad de La Habana. Este “hombre orquesta”, como se podría llamar, es también compositor musical, clarinetista, poeta, historiador, escritor y promotor cultural. Trabajó en El Bayardo, El Habanero, Trabajadores, y de igual modo colaboró con distintas publicaciones en Cuba y el extranjero.

Debido a su labor, posee condecoraciones nacionales e internacionales, entre ellas, la Réplica del machete de Máximo Gómez, la Moneda Conmemorativa 50 Aniversario de la Unión de Periodistas de Cuba y las distinciones Raúl Gómez García y Félix Elmuza.

Pie de foto: El libro Caballeros Andantes es una joya para los amantes del periodismo.

¿LA PEOR DE LAS EMOCIONES?

¿LA PEOR DE LAS EMOCIONES?

A más de setenta años de su publicación original, la novela Impaciencia del corazón, de Stefan Zweig, presenta una de las cuestiones morales más controvertidas: ¿es capaz una persona de sacrificarse por otra en nombre de la compasión?

Texto y foto:

MABEL SÁNCHEZ TORRES,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Escrita y publicada por primera vez en 1939, la novela Impaciencia del corazón, del austriaco Stefan Zweig (1881-1942), regresa a las librerías cubanas en 2007 de la mano de la Editorial Gente Nueva.

En una trama que sorprende por la brillante construcción psicológica de los personajes -quizás la virtud más admirable de la narrativa del autor-, las reflexiones del protagonista en torno a la culpa, la pena y el arrepentimiento calan en la sensibilidad del lector, pues reflejan la tríada de emociones que, sucedidas en ese orden, experimenta quien adolece la enfermedad del prójimo.

En la obra, Zweig nos invita a descubrir dos clases de compasión: «una cobarde y sentimental, que en verdad no es más que la impaciencia del corazón por librarse lo antes posible de la molestia que causa la desgracia ajena, […] es […] una forma instintiva de ahuyentar la pena del alma propia; la otra, la única que importa, es la compasión no sentimental pero productiva, la que […] está dispuesta a compartir un sufrimiento hasta el límite de sus fuerzas y aún más allá de ese límite».

Dicotomías clásicas como el bien y el mal, y el cuestionamiento de la imagen propia frente a la sociedad convergen en la trama. Aunque son temáticas abordadas también en Fouché (1929), una de sus más brillantes biografías, el estilo literario del presente texto recuerda el tono intimista de Carta de una desconocida (1927) y Veinticuatro horas en la vida de una mujer (1929), donde el escritor recrea el universo femenino, como pocos hombres consiguen hacerlo.

En La piedad peligrosa, título por el que también se le conoce a la historia, luego de una retrospección inicial, el lector descubre de la voz del protagonista, el teniente Anton Hofmiller, su asignación a una nueva unidad militar. El recién llegado pronto entabla amistad con el poderoso señor Lajos Von Kefeskalva, que sufre la invalidez de su hija Edith, de 17 años.

Motivado por la pena que le causa la parálisis de la muchacha, el inexperto teniente a menudo visita la mansión Kefeskalva y decide poner sus días en favor de la felicidad de la joven. Con frecuencia, el espectador encuentra pasajes de una sentida meditación personal, cargadas de un altruismo que pudiera resultar controvertido, cuando la honestidad y el instinto egoísta del ser humano entran en juego.

Así, Zweig introduce el conflicto que marca el curso de los acontecimientos: ¿es capaz una persona de sacrificarse por otra en nombre de la compasión? Ante tal cuestionamiento, la novela alcanza el clímax en el instante que Hofmiller se compromete con Edith y lo embarga la tentación de no cumplir su palabra.

El estado de la enferma figura entonces, como la rueda de la fortuna que marcará el destino de quienes permanezcan cerca de ella. Para su prima Ilona, la casi imposible recuperación de Edith representa la única posibilidad de contraer nupcias con su prometido, y para el padre se resume en el fin del dolor que durante años lo acompaña.

En el desarrollo de los sucesos, narrados en un capítulo único, los personajes transgreden lo moralmente correcto en nombre de la salud de la señorita Kefeskalva. En ese sentido, el doctor Condor asume posiciones polémicas cuando propone algún nuevo procedimiento, consciente de que el resultado siempre es el mismo.

El médico, casado con una mujer a la que promete devolverle la vista y cuyo juramento no puede realizar, asoma como la otra cara de la moneda. Él sí es capaz de consagrar su existencia por aparente pena. Pero, ¿logrará Hofmiller desprenderse del bienestar propio y corresponder al amor de Edith? ¿Se merece la lástima su mala reputación?

Pie de foto: El libro Impaciencia del corazón, de Stefan Zweig, escrito en 1939, también es conocido como La piedad peligrosa.

LA HABANA DE ANDARES

LA HABANA DE ANDARES

Merecedora del Premio Alejo Carpentier de novela en 2006, Inglesa por un año, de Marta Rojas, ofrece otra mirada a la toma de La Habana por los ingleses en 1762.

Texto y foto:

EDILMARYS AJETE NARANJO,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Martín de Andares (Sable Desnudo) no imaginó que este viaje a La Habana cambiaría su vida. Los contratiempos del camino quedaron olvidados cuando conoció a la marquesa Beatriz de Jústiz. Aquella tarde fue el principio de la más importante de sus aventuras.

Inglesa por un año (Editorial Letras Cubanas, 2006) refleja el período entre 1762 y 1763 cuando los ingleses atacaron La Habana, aunque Sable Desnudo, personaje principal del relato, intentó evitarlo. Con ayuda del capitán De Flores y fray Butler, doña Beatriz aprovecha la noticia que trae este pirata y prepara condiciones para la posible ocupación.

En esta novela de ficción, su autora Marta Rojas logra recrear con otro matiz una época que ha sido poco tratada en la historia de Cuba. El panorama político y socioeconómico de aquel período aparece para fundamentar el contexto donde se desarrolla la relación entre el marinero y la marquesa.

La obra consta de treinta capítulos divididos en dos partes, en los cuales la exquisita descripción da la sensación de estar viviendo en La Habana del siglo XVIII. La imaginación de la autora, respaldada por un estudio documental de los escritos existentes, pone en voz de los personajes todo lo sucedido, al tiempo que incorpora al texto fragmentos de los documentos originales para dar veracidad a la información que ella empleó como base al escribir la novela.

A través de un lenguaje sencillo, en su mayoría en términos de marinería, se desarrollan los hechos, casi todos narrados desde la perspectiva de Sable Desnudo. Conocer a doña Beatriz le dio una nueva visión del entorno en que había vivido, ser huésped en aquella casa era tan placentero como estar en la mar, a partir de ese momento su pasión estaría dividida.

Los encantos de la bata traslúcida que solía llevar la marquesa en la casa, aunque lo embriagaban, no lograron separarlo de la mar solo que a partir de ahora ya no serían saqueos ni amores en cada puerto; su nueva conquista era convertirse en un gran comerciante y ganarse el respeto de la dama.

Entre secretos y planes para sobrevivir a la ocupación inglesa se desarrolla la trama en la cual los personajes secundarios encuentran ingeniosas soluciones para esperar lo que le depara el destino. Algunos con suerte y otros no, pero logran sobreponerse a la injerencia extranjera y dejar su pequeña huella en la historia habanera.

Inglesa por un año evidencia cómo se vivía siendo una colonia; además, la ejemplificación permite al lector hacer una comparación entre el coloniaje español y el inglés. Las mentiras comunes cuando se trata de riquezas, la tentación que provocaban a los soldados las damas de compañía, los pecados de los representantes de la iglesia y la convivencia matrimonial son algunos temas que aborda la novela.

Marta Rojas, reconocida mayormente como periodista, es una gran narradora y en este libro demuestra su habilidad de recrear la realidad con la belleza del lenguaje, como lo hace en sus obras El columpio de Rey Spencer, Santa lujuria y El harén de Oviedo.

Una Habana inglesa y sus realidades son una interesante propuesta para acercarse a este relato y descubrir anécdotas que quizás hubiesen cambiado la historia de esta ciudad.

Pie de foto: Lo recogido en el diario de Martín de Andares constituyó la base para escribir Inglesa por un año.

EL HOMBRE MÁS GENIAL Y ABOMINABLE

EL HOMBRE MÁS GENIAL Y ABOMINABLE

El perfume. Historia de un asesino, es la primera novela del escritor alemán Patrick Süskind, y fue publicada en 1985.

ANDRÉS LUIS HERRERO PÉREZ,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Muchos amigos me lo recomendaron, pero no le di importancia, marginé aquel libro que no tenía portada. Luego de seis meses pasando el Servicio Militar y una biblioteca agotada, reapareció. En la primera hoja –que hacía función de portada- decía: La Historia de un asesino.

Dividida en cuatro partes que contienen en total cincuenta y un capítulos, se convirtió rápidamente en un best-seller y se tradujo a más de cuarenta idiomas.

Ambientada en París, la historia se narra a través de su protagonista Jeam-Baptiste Grenuille, hijo de una vendedora de pescado. La criatura, desechada por su madre, se abrió camino en el mundo con un don especial: ver el universo por la nariz.

Para leerlo solo necesité de un día. ¿Cómo podía alguien idear un personaje tan poco habitual? Mientras más me adentraba en la historia, más deseaba haber sido yo su escritor. Me mostró desde el comienzo un mundo nuevo, desconocido para todo aquel que pasa por la vida sin fijarse en detalles como el olor.

“Grenuille” significa rana en francés, un apodo que le sentaba, ya que su cuerpo y rostro fueron azotados por muchos años de trabajos forzosos con un curtidor de pieles llamado Grimal, gracias a este, conoció a quien sería su primer maestro en el arte de mezclar esencias: Giuseppe Baldini.

De forma poco ortodoxa se introdujo Jeam-Baptiste en la vida del maestro perfumero, en medio de la oscuridad mezcló los frascos que se encontraban en la bodega de Giuseppe y creó una obra maestra, un perfume como ninguno, parecido a los que hacía el diestro Baldini en sus mejores tiempos.

El taller necesitaba un nuevo espíritu, y el maestro lo sabía, ¡Era un genio! Podía darle de nuevo la gloria antes perdida. Adquirió al feo individuo por veinte francos, le enseñó el arte de la destilación a cambio de más creaciones, incuso lo obligó a escribir cien recetas en un cuaderno por si la magia desaparecía.

Después de las diez horas de lectura, los olores llegaron de veras a mi nariz, podía –como Grenuille- ver el mundo diferente, sentía el olor de la lluvia, la tierra, la baranda de mi garita, percibía, incluso, la sucia correa de mi fusil, podía sentirlo todo, o al menos eso creía.

Él sí lo sintió, el aroma de la muchacha de los cabellos rojos que pelaba ciruelas. Anhelaba ese olor, quería conservarlo porque era diferente a todas las emanaciones putrefactas de París, y su deseo era tan grande que la estranguló. ¿Cómo sacar esa esencia que se perdía exudada por el cadáver? Fue entonces cuando intuyó su razón: crear el aroma perfecto.

Jeam-Baptiste Grenuille comenzó un viaje a donde le había dicho Baldini, a la tierra de los perfumistas: Grasse. Evitó los pueblos y ciudades pestilentes solo guiado por su nariz. Perdió por un tiempo su meta, embriagado por la fragancia de la naturaleza libre de humanidad.

Después de siete años enclaustrado en una cueva, una pequeña brizna de aroma, similar a aquella producida por la muchacha de cabellos rojos, lo despertó. Retomó su camino.

Madame Arnulfii, perfumista de Grasse, le enseñó un método para capturar el olor por medio de grasa animal, a cambio de trabajar para ella.

No consiguió que las mujeres se quedaran quietas mientras extraía su aroma, por tanto, eligió asesinarlas. Una y otra, hasta veinticuatro, solo faltaba aquella, la pieza cumbre de su esencia perfecta.

Después de mucho trabajo y perseguido por la policía, el genio lo consiguió, completó su cometido, mas no se sentía realizado. En París  regó sobre sí aquel perfume y murió comido por una multitud que en torno a él se amontonó, todos querían un pedazo de aquel ángel. Esta es la historia del hombre más genial y abominable de su tiempo.

Pie de foto: La esencia de una mujer volvió loco al excepcional perfumista (Tomada de Internet).

CUANDO LA SAL SE CONVIERTE EN HISTORIA

CUANDO LA SAL SE CONVIERTE EN HISTORIA

El viejo y el mar es una de las obras más notorias del escritor norteamericano Ernest Hemingway, quien obtuvo en 1953 el premio Pulitzer y un año más tarde el Nobel.

Texto y foto:

ERNESTO LAHENS SOTO,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Hay obras perfectas que impiden que sus autores puedan escribir otra vez, que abarcan lo más grande de su estilo y madurez artística. El viejo y el mar, última novela del escritor y periodista norteamericano Ernest Hemingway, es la cumbre de su carrera. Abarca más allá de una simple historia y capta la psiquis humana.

Publicada por primera vez en 1952, narra la historia de Santiago, un viejo pescador que se enfrenta de manera obstinada contra su destino. Fue la última obra escrita por el autor norteamericano, trabajos posteriormente publicados como: Islas en el estrecho, fueron redactados con anterioridad. Para Hemingway no hay fracaso: “El hombre no está hecho para la derrota”, el pescador ha luchado hasta el límite de sus fuerzas.

Nació en Oak Park, Illinois, el 21 de julio de 1889, en un ambiente de constantes problemas familiares que marcarían su vida y obra. La madre lo hizo vestir como niña, hasta que a los 15 años decidió huir de casa y estudiar Medicina como el padre, mientras realizaba el oficio de periodista. Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial se alistó como voluntario de ambulanciero en el Ejército Italiano.

Sus principales novelas Fiesta, Adiós a las armas, Por quién doblan las campanas y El viejo y el mar abordan temas como el odio a la guerra, el destino, el amor y el sacrificio de los hombres. Destacó sobre otros escritores de su época por un estilo minimalista, centrado en la realidad y un fuerte rechazo a las tendencias barrocas, quizás condicionado por su formación periodística.

Con tan solo 107 páginas, El viejo y el mar es un constante hervidero de tensiones, cada línea tiene olor a alga, cada palabra lleva la sangre y el sudor de los pescadores. El vaivén de las olas transportaron las musas hasta su casa en Finca Vigía, donde, de pie y casi sin darse cuenta, daría vida a uno de los más grandes libros del siglo XX.

La astucia contra la fuerza, el hombre contra la bestia, es el duelo de este libro. El protagonista se enfrenta a su mundo tan solo con su propia ayuda, sin el apoyo de otros hombres. No odia a su rival, más bien lo admira, pero ambos no pueden llevarse el triunfo. Como la transformación de Sancho en Quijote en la inmortal obra de Cervantes, el pescador se irá trasformando, de manera psíquica, en pez.

Con solo dos personajes principales, el viejo Santiago y el mar, encarnado en forma de pez, refleja parte de la realidad del género humano. Es propio de nuestra naturaleza el afán por escribir nuestro destino. El hambre y los días sin dormir por encontrarse en constante lucha provocan en el protagonista alucinaciones que lo motivan, que van desde la Virgen del Cobre hasta el jugador de Grandes Ligas Joe Di Maggio.

Describe el poblado pesquero de Cojímar sin necesidad de mencionar su nombre. Los pasos andan por la Terraza donde beben cerveza los lobos de mar mientas narran sus hazañas en el Gran Azul. Los pies descalzos se deslizan sobre la arena del Cachón. La vista se aleja de la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen y recuerda tiempos pasados con olor a pez.

Este libro, considerado como el más importante de los reportajes de Hemingway, lo llevó a obtener el Premio Pulitzer en 1953 y un año más tarde el Nobel de Literatura por sus obras completas. Este último lauro fue traído a La Habana por el Primer Ministro sueco, dado a que el escritor se encontraba convaleciente de dos accidentes aéreos sufridos en África mientras cazaba.

La obra de Hemingway marcó una época en la literatura contemporánea. El retorno al realismo, de una manera minimalista mostró de forma clara su relación con el mundo. Quizás su principal característica fue el uso del reportaje como centro de la creación artística.

Pie de foto: El viejo y el mar narra la historia de un hombre que se enfrenta solo a la inmensidad del mar.