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PARA NO AGUAR LA FIESTA…

PARA NO AGUAR LA FIESTA…

La Editorial Letras Cubanas reeditó en 2015 el volumen La noche del aguafiestas, en homenaje al cumpleaños 80 de su autor, el poeta, narrador y dramaturgo  Antón Arrufat.

Texto y foto:

DARIAN BÁRCENA DÍAZ,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

“Pues esa noche, de paseo por La Habana, estuvo muy locuaz. Cualquier cosa le servía de asunto, se le convertía en tema. Sus amigos lo escuchaban exaltados y se detenían en las esquinas, no para cuidarlo y cuidarse del tránsito, a esas horas casi convertido en palabra, sino para rodearlo, acuciarlo con preguntas, contradecirlo un poco y espolear su imaginación de contrincante (…)”.

Así comienza el primer capítulo de la novela La noche del aguafiestas, del poeta, narrador y dramaturgo cubano Antón Arrufat Marat, reeditado por la Editorial Letras Cubanas en el año 2015 por tercera vez, en conmemoración al aniversario 80 de su natalicio. Esta obra mereció el premio Alejo Carpentier en el año 2000.

Son cinco amigos los encargados de dar vida a las páginas de este libro, quienes se reúnen, cuando la vorágine de la urbe capitalina reposa en la mansa quietud de la madrugada, para conversar y filosofar sobre los más diversos temas. Actité, Jenofonte, Licino,  Filonús y Aristarco Valdés, el Aguafiestas, asisten de manera regular al malecón, testigo y participante a la vez de sus conversaciones que casi siempre versan sobre cualquier aspecto de la sociedad cubana contemporánea.

Arrufat, autor de otros volúmenes como: La caja está cerrada (1984), Ejercicios para hacer de la esterilidad virtud (1998), Vías de extinción, Los siete contra Tebas y Virgilio Piñera entre él y yo, nos presenta con esta novela, el retrato de una noche habanera.

Es una novela singular, donde confluyen estilos como el ensayo y ciertos matices poéticos, así como el empleo de un narrador heterodiegético, lo que favorece un mayor nivel de cercanía con el lector.

Sus 283 páginas entrañan una especie de homenaje al diálogo, al uso de la palabra como medio de aprendizaje y fuente inagotable de conocimientos a partir de analizar las diferentes aristas de cualquier aspecto de la realidad y, además, la obra rinde honores a varios escritores como los franceses Émile Faguet y Marcel Proust, y los cubanos Cirilo Villaverde y Virgilio Piñera.

El Aguafiestas es un sujeto sin edad ni domicilio fijo, contradictorio, enigmático, resumen de los conocimientos de todos sus acompañantes y quizás por eso el más crítico, quien todo lo sabe y siempre dice la última palabra. En ocasiones, se ausenta de manera inexplicable y los otros adquieren cierto protagonismo, pero también lo extrañan, echan en falta ese antagonismo y la crítica que hace avanzar la tertulia.

Arrufat logra una simbiosis perfecta que trasluce en una propuesta diferente a las anteriores y que no deja margen al aburrimiento. Utiliza un lenguaje entendible, ni excesivamente rebuscado ni burdamente coloquial, permitiendo que la narración fluya como una conversación espontánea, sin estructuras rígidas, con manera flexible.

Finalmente, La noche del Aguafiesta nos atrapa y se convierte en nuestra noche, situándonos en el malecón para dialogar y filosofar con los cinco amigos en una especie de extraña, pero provechosa complicidad.

Pie de foto: La noche del aguafiestas obtuvo el premio Alejo Carpentier como mejor novela en el año 2000.

UNA PLEGARIA AL INTERIOR DE LA NOCHE

UNA PLEGARIA AL INTERIOR DE LA NOCHE

Con una prosa fluida y absorbente, Plegarias nocturnas cautiva al lector desde la inmortalidad del amor en una realidad políticamente compleja.

Texto y foto:

LISDANYS ALFONSO RIVAS,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

La novelística colombiana subsiste como espejo de la contemporaneidad. Su connotación deviene la existencia de males sociales imperantes en políticas de corrupción, paramilitarismo y narcotráfico. La literatura latinoamericana no solo muestra el semblante oscuro del contexto social preponderante, también adhiere a historias de vida la realidad involucrada para su desarrollo o retroceso.

Temáticas de esta índole podemos encontrarlas en Plegarias nocturnas, la más reciente novela publicada de Santiago Gamboa Samper (Bogotá 1965), quien constituye -según el crítico y ensayista español Manuel Vázquez Montalbán- “el autor colombiano más importante junto a Gabriel García Márquez”.

La obra gira en torno a circunstancias como las mencionadas anteriormente, y siendo una de las últimas producciones literarias de quien escribiera, además, Páginas de vuelta, El síndrome de Ulises (finalista del premio Rómulo Gallegos 2007), Perder es cuestión de método y Necrópolis; Plegarias nocturnas figura como una excelente muestra narrativa en la que el drama y la tragedia actúan como protagonistas de una historia puramente amorosa.

Entretejida de hechos y datos de una objetividad social envuelta en la sordidez, la trama sucede mediante la mezcla de ficción y crónica, la cual borra con naturalidad cualquier frontera existente entre ellas, sin dejar de acentuar la sensación verosímil de lo narrado.

Cuenta la novela que a Manuel Manrique, estudiante de Filosofía, lo arrestan en una cárcel de Bangkok bajo la acusación de narcotráfico. A pesar de que puede enfrentarse a la pena de muerte si no se declara culpable, para él lo más importante es la necesidad de encontrar a su hermana Juana, desaparecida en Colombia años antes.

La historia de Manuel conmueve al cónsul colombiano en Nueva Delhi, que a partir de ese momento se embarcará en una búsqueda con el objetivo de reunir a los dos hermanos.

Con síntomas de intolerancia y prosa transparente en la que se vislumbra melancolía, Plegarias nocturnas es el relato de una familia inmersa en una sociedad violenta bajo la sombra del paramilitarismo y los desaparecidos. Lo que algunos críticos llamarían, como es el caso de Mario Mendoza Zambrano, “una corriente ininterrumpida de voces que hablan, piensan y nos cuentan qué fue lo que sucedió. Una melodía multiplicada en el amor de dos hermanos”.

No obstante, chocamos una y otra vez con el mismo evento víctima del cliché: el reflejo de una realidad arremetida por la “estética de la violencia”, tendencia manifestada desde los escritores del boom, pero que ha tomado mayor auge en los autores contemporáneos. A medida que avanzamos en la lectura de la obra, descubrimos el sentido compromiso de un cónsul encandilado con la esperanza de alterar la dirección curva de dos destinos.

La novela conmueve al lector tras alterar lo predeciblemente supuesto del desenlace terminante, y preferir la tragedia antes del clásico final feliz. Plegarias nocturnas burla nuestra expectativa con la sorpresa insospechada, lo que constituye, quizás, el valor fundamental de la historia.

Pie de foto: Plegarias nocturnas constituye una de las novelas más notables de Santiago Gamboa, publicada en 2012 por la Editorial española Mandadori.

LA CANCIÓN DE MARTIN: MÁS QUE FANTASÍA

LA CANCIÓN DE MARTIN: MÁS QUE FANTASÍA

En cinco entregas nos ha regalado George R. R. Martin una historia llena de magia que supone su cúspide como novelista: Canción de hielo y fuego.

DANIEL MONTERO PUPO,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

En la actualidad son muchas las sagas de fantasía que compiten por la preferencia de los lectores. Sin embargo, una de ellas destaca por encima del resto, pues ha atrapado no solo a los habituales seguidores del género, sino a personas de toda edad y procedencia, que han encontrado en ella mucho más que una de las comunes historias fantásticas medievales. Esa saga es Canción de hielo y fuego, del escritor estadounidense George R. R. Martin (GRRM).

Su primer volumen, Juego de tronos, fue publicado en 1996 en los Estados Unidos por la editorial Harper Collins, al que le siguieron Choque de reyes (1998), Tormenta de espadas (2000), Festín de cuervos (2005) y Danza con dragones (2011). Todos contados con la estremecedora narrativa de Martin y su desdén por lo predecible y lo que no se asemeje a su idea de la realidad posible, sin importar los problemas cardiacos provocados a sus hordas de fanáticos.

Del imaginario del escritor ha nacido más que un mundo, un universo, y su centro parece ser Poniente. Las mayores casas nobiliarias luchan encarnizadamente por el poder. Intrigas, traiciones y conspiraciones desatan una guerra, soporte usado por el autor para entrelazar decenas de personajes llenos de matices en un mundo donde la magia parece estar renaciendo. Reyes, caballeros, cortesanos intrigantes, hechiceros, todos toman sus posiciones para sacar partido en el "juego de tronos", donde la derrota se paga con la vida.

Hielo y fuego, lobos y dragones, Norte y Sur, dioses antiguos y nuevos. La mitología de la saga es de proporciones gigantescas, pero tan bien estructurada que cuesta creer que su procedencia no sea la realidad. No por gusto es llamada por muchos la mejor serie de fantasía mitológica posterior a Tolkien.

Los personajes son difíciles de encasillar en una línea de comportamiento, GRRM ha borrado de su diccionario los términos bueno y malo. Por el contrario, nos entrega personas hermosas en su imperfección y desquiciantes por su ambigüedad. Además, ninguno está a salvo. En su búsqueda de realismo, el autor no duda en eliminar con un chasquido de dedos a algunos que a priori pudieran parecer imprescindibles para el desarrollo de la historia.

Otra clave de su éxito es la inspiración histórica de la trama. El conflicto entre la casa Stark y Lannister se inspira en la Guerra de las Dos Rosas, todo Poniente es una reconstrucción de la Inglaterra medieval. Mongoles, vikingos y otras referencias en versión Martin también pueblan la obra.

En los años ´70 y ´80, este norteamericano de Nueva Jersey publicó varios libros e historias cortas que le valieron premios como el Hugo y el Nébula de literatura fantástica. Títulos como Muerte de la luz y Un sueño del Fevre, que lo convirtieron en un renovador de la literatura del género. Pero Canción de hielo y fuego es su cumbre como novelista, con ella se ha ganado no solo a la crítica sino a millones de seguidores que lo veneran como a un profeta de otro universo, al que solo pueden acceder a través de él.

Una década trabajando en Hollywood lo hicieron tomar una decisión: aplicar el formato de las series de televisión a su Canción... La historia es contada en tercera persona, pero cada capítulo es visto desde la perspectiva de un personaje en específico, como si sus ojos se volvieran el palco provisional que ocupa el escritor, y nosotros con él. Cada libro es como una temporada de la serie.

A pesar de ser trepidante y adictiva, la saga es de proporciones kilométricas. Además, el principal reproche que le podemos hacer a su autor es su carácter inconcluso, pues aún están por publicarse Vientos de invierno y Un sueño de primavera. Pero aun así, ser súbdito de Poniente no parece una mala decisión.

Pie de foto: La primera edición de Juego de tronos, título que inicia la saga, actualmente se comercializa como un artículo de coleccionista.

ENTRE VENENOS E INTRIGAS

ENTRE VENENOS E INTRIGAS

El misterioso caso de Styles fue el primer libro de la escritora británica Agatha Christie.

THAÍS HERNÁNDEZ  LOMBAO,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,  

Universidad de La Habana.

No se podría hablar de la novela policíaca sin hacer referencia a la Reina del Crimen, Agatha Christie, conocida por obras como Las Manzanas, Intriga en Bagdad o Muerte en el Nilo;  pero pocos saben que ella, junto al meticuloso belga Hércules Poirot, descifraron su primer asesinato en 1920 con El misterioso caso de Styles. 

Este libro vio la luz gracias la editorial británica Dodd Mead & Company  Inc. y fue traído a Cuba bajo el sello de Arte y Literatura en 1978.

Valiéndose de una profunda descripción como principal acompañante de la fluida narración, además del uso de mapas, logra transportar a los  lectores a la de escena del crimen.

En esta ocasión, tomando como retablo el poblado de Essex, Poirot desarrolla su espectacular show detectivesco que mantiene en tensión hasta la última línea, e incita a reflexionar sobre la psiquis de cada uno de los sospechosos de la súbita muerte de la millonaria Emily Cavendish, propietaria de la mansión Styles.

Luego de que el doctor especula sobre un posible envenenamiento por estricnina, las intrigas entre los propios miembros de la familia van creciendo, ya que tanto los hijos de la difunta, John y Lawrence, su nuevo esposo Alfred Ingelthorp, las sirvientas y su nuera Mary, deseaban apropiarse de su dinero y propiedades.

Todos tenían cuartadas dudosas, pero el pequeño inspector belga deberá hacer uso de sus habilidades para discernir quién de todos es el asesino.

La historia está contada en la voz de Mr. Hastings, amigo común de los Cavendish y Hércules, quien posee gran fascinación por los  casos de misterio y ha sido fiel espectador de cada acontecimiento.

Según las pistas que se van develando, el texto conduce al lector por disímiles caminos y  como investigador en 200 páginas, presupone asesino a este o aquel, pero contrario a predicciones, el final siempre se envuelve en sorpresa inesperada.

Debido a este singular clásico,  Christie se insertó exitosamente en el mundo de la literatura policial, marcando su estilo propio, y convirtiendo a Poirot en uno de los detectives más famosos del mundo.

Ella no se redujo a relatar sobre malhechores, inspectores e intrigas, lo que muchos no conocen es que también dedicó parte de su tiempo al género romántico, mudando la piel de mitigadora de acertijos para convertirse en la enamoradiza  Mary Westmacott.

A diferencia de sus demás escritos, en este se aprecia una parte más humana del ingenioso policía, que demuestra ser capaz de cometer errores y sacar conclusiones apresuradas, detalles que va perdiendo con el transitar del tiempo hasta convertirse en la figura perfecta,  analítica y calculadora.

Más allá del ingenio del asesino, de la cuidadosa planificación de las conspiraciones, los rencores, las envidias e intentos por ocultar los hechos y las pistas, en El misterioso caso de Styles se demuestra una vez más que no existe crimen perfecto.

Pie de foto: Aunque la portada no hace honor al contenido, al abrirla se devela un excelente texto que logra captar la atención desde el inicio (Foto tomada del sitio ecured.cu).

EL IMPERIO QUEBRADO

EL IMPERIO QUEBRADO

Tirano, Juegos Funerarios, de Christian Cameron, es la tercera entrega de la reconocida serie de novelas históricas sobre las Guerras de los Diádocos.

JUNIOR HERNÁNDEZ CASTRO,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Traiciones inesperadas, épicas batallas y efímeros romances son la fórmula empleada por Christian Cameron para recrear una de las épocas más convulsas de la Época Antigua. Juegos Funerarios, tercer libro de la saga Tirano, sumirá al lector en las Guerras de los Diádocos, una serie de conflictos ocurridos entre los partidarios de Alejandro Magno por disputarse el imperio del conquistador, tras su muerte en el 323 a.C.

El autor, nacido el 16 de agosto de 1962, en Pittsburg, Estados Unidos, es un historiador militar, y escritor de varias obras como Alan Craik y The Long War. En 2008 publicó Tirano, una novela ambientada en los años dorados del Reino Macedónico con críticas positivas, por lo que desde entonces han visto la luz cinco tomos más de la acreditada serie: Tormenta de Flechas (2009), Juegos Funerarios (2010), El Rey del Bósforo (2011), Destructor de Ciudades (2013) y Fuerza de Reyes (2014).

El tercer volumen de la serie, traducido al español y publicado por Ediciones B en 2011, consta de 656 páginas y está dividido en siete partes y un epílogo. Cuenta, además, con varios mapas de las regiones reseñadas y un epígrafe dedicado a la bibliografía consultada.

La novela, una argamasa de historia y ficción, hace referencias a múltiples religiones y culturas de la Época Antigua, a la discriminación de la mujer en la sociedad, a los recelos entre griegos y macedonios, y al complejo sistema de estrategias comerciales de los nacientes imperios.

Los protagonistas son los gemelos Sátiro y Melita quienes, a causa de un complot tramado por Herón —tirano de la ciudad de Panticapea—, deben renunciar al reino del que son herederos y huir para salvar sus vidas. Acompañados por el preceptor Filocles, un sofista y guerrero espartano adicto al vino; y Terón, un atleta corintio amante de los combates, se ven obligados a madurar en un mundo donde no pueden confiar en nadie, y en el que cualquiera podría entregar sus cabezas a los perseguidores.

Saber adónde ir y con quién pactar es todo un dilema, pues en el juego del poder y la muerte todo vale, y ni aliarse con los poderosos garantizará la supervivencia de los hermanos, dispuestos a reconquistar aquello que les fue usurpado.

La trama, relatada por un narrador omnisciente, se desarrolla fundamentalmente en el Mediterráneo Oriental, y el lector puede descubrir a través de las realistas descripciones las diferencias abismales entre ricas ciudades como Rodas y Alejandría, y las zonas rurales adyacentes. Asimismo, las caóticas batallas —terrestres y navales— son el escenario donde el autor revela el lado humano de muchos personajes históricos: Eumenes de Cardia, general griego; Antígono I, el Tuerto, noble y militar heleno; Casandro de Macedonia, otro de los Diádocos; y Ptolomeo I, gobernador de Egipto.

El lenguaje, ajustado a la etapa, no resultará complicado gracias a un glosario que contiene más de 30 términos propios del periodo m hoplita (soldado de infantería pesada), kopis (puñal o espada de hoja curva) y aspis (escudo redondo).

Aunque Tirano, Juegos Funerarios no está exento de imperfecciones —pequeñas historias sin cerrar y ciertos pasajes desordenados—, constituye una obra apasionante, que aborda un tema trillado desde una perspectiva novedosa, donde la caracterización de los personajes, el admirable argumento y los giros imprevistos dejarán a los lectores atónitos, preguntándose constantemente qué ocurrirá al final.

Pie de foto: Tirano, Juegos Funerarios, es una de las novelas más importantes de Christian Cameron (Foto: Novelahistórica.net).

UNA HISTORIA A CONTRARRELOJ

UNA HISTORIA A CONTRARRELOJ

La novela juvenil Bajo la misma estrella, una entrega literaria muy realista, demuestra que las historias de amor, aunque dramáticas, aún en tiempos actuales resultan conmovedoras.

MARÍA LUCÍA EXPÓSITO GONZÁLEZ,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana. 

“La culpa no recae en nuestras estrellas,

sino en nosotros, que estamos bajo ellas”.

William Shakespeare

 ¿Ha sentido alguna vez que, al leer la última frase de un texto, debe algo al autor? Bajo la misma estrella, novela publicada en enero de 2012 en New York por la Editorial Nube de tinta y escrita por John Green, tiene 304 páginas que son suficientes para cambiarle el destino a quien se atreva a desandar las sensaciones que propicia.

Bajo la misma estrella contiene una sinopsis muy realista: A Hazel y Gus les gustaría tener vidas más corrientes. Algunos dirían que han nacido sin suerte, que su mundo es injusto. Ellos son solo adolescentes, pero si algo les ha enseñado el cáncer que ambos padecen es que no hay tiempo para lamentarse, porque solo existe el hoy y el ahora. Por ello, con la intención de cumplir el mayor deseo de Hazel, conocer a su escritor favorito, cruzarán juntos el Atlántico para vivir una aventura a contrarreloj.

Hazel ama los libros de ficción, leer poesía y dormir, aunque preferiría que sus pulmones funcionasen normalmente. Su madre cree que está deprimida, así que la inscribe en una sociedad de apoyo todos los miércoles. Aunque, en realidad, no hay nada más deprimente que un grupo en el que cada día la lista de compañeros por los que rezar es más larga.

El gran acierto de John Green, aparte de crear dos protagonistas fantásticos, es el enfoque que le da a la historia. La narración resulta ágil e ingeniosa y está llena de sarcasmos y comentarios políticamente incorrectos. Hay momentos de bastante complejidad, tanto literaria como filosófica, que si embargo no ralentizan la lectura, como es el caso de los diálogos entre Hazel y Gus.

John Green no endulza la situación de los personajes principales para complacer al lector, y la naturalidad con la que trata el tema es precisamente uno de sus grandes triunfos.

Bajo la misma estrella resulta un tanto intimista, porque todos sus personajes sufren la enfermedad directa o indirectamente. Además, puede llegar a ser un libro manipulador en ciertas aristas por su alta carga sentimental.

Si bien inicialmente se piensa que el tema central es el cáncer, conforme avanza la historia cambia el sentido de la trama, pues no cae en los tópicos propios del padecimiento. Esta entrega desprende matices variados, tanto dramáticos como satíricos, hace reflexionar con profundidad sobre el valor de la vida, no idealiza la enfermedad ni glorifica a sus víctimas, no ahonda en los malos momentos y resulta conmovedor.

Desde el comienzo hasta la última frase se evidencia el sentido y razón de ser en la trayectoria, o sea, cada palabra se viste de importancia en el desarrollo de la trama. Con esto, el autor consigue mantener al lector atento a todo lo que ocurre, sin que este se distraiga ni un momento. Algo cautivador en el texto es la cantidad de citas hermosas que se pueden encontrar en el interior de esta novela: "El mundo no es una fábrica de conceder deseos"; o "No puedes escoger si serás lastimado en este mundo, pero sí decidir quién te lastima".

Bajo la misma estrella, una de las novelas que demuestran la calidad de la literatura juvenil de estos tiempos, es un libro para releer, amar y valorar la vida través de letras que laten.

John Michael Green (24 de agosto de 1977), escritor estadounidense de literatura juvenil, se especializó en Filología Inglesa y Ciencias de la religión. Su primer libro, llamado Looking for Alaska (Buscando a Alaska), es Premio Michael L. Printz 2006 a la mejor novela juvenil que presenta un contexto semejante a Bajo la misma estrella por su final trágico.

Pie de foto: El gran acierto de John Green, aparte de crear dos protagonistas extraordinarios, es el enfoque que le da a la trama (Foto tomada de Internet).

 

LOS VERSOS DE LA LIBERTAD

LOS VERSOS DE LA LIBERTAD

El Diario de prisión, de Ho Chi Minh, considerado la perla en la literatura vietnamita, simboliza la lucha por la independencia y la libertad nacional.

TU CU THI THANH,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Entre los cepos y grilletes de cárceles chinas, nació la obra maestra de la literatura vietnamita Diario de prisión, en que el gran Padre de Viet Nam, Ho Chi Minh, mostró su inmenso amor a la patria, a los seres humanos y la compasión por las vidas desafortunadas. El texto de valor inmortal, publicado por la Editorial Van Hoa en 1960, de género lírico, revela el ánimo revolucionario, el alma artística y la voluntad de hierro del soldado comunista.

Ho Chi Minh (1890-1969), conocido como Tío Ho, fundador y presidente de la República Democrática de Viet Nam, un enorme héroe del siglo XX, incursionó en muchas esferas artísticas. Entre ellas sobresale su impronta literaria con varios títulos de valor incalculable como El testamento, Declaración de Independencia e Ideas revolucionarias. Su nombre destaca entre los magnos referentes mundiales del proletariado, mucho más allá de los límites de su país.

El Diario de prisión, escrito de septiembre de 1942 a octubre de 1943, incluye 133 poemas, en la lengua clásica de los letrados chinos, según las reglas poéticas de la época Tang y, además, concebido en treinta prisiones diferentes de trece municipios de la provincia Kuomintang.

Sin embargo, el texto despareció en una aldea fronteriza de Viet Nam, luego fue encontrado en 1955 y cinco años más tarde, la Editorial Van Hoa lo publicó por primera vez. En ese mismo año, 1960, la Editorial Colección del Sur, de Cuba, realizó la edición de la traducción en español por el poeta Félix Pita Rodríguez, una de las grandes voces de la literatura cubana.

Cada verso parece un breve cuento compuesto en un rincón en penumbras. Todos son efectivamente apuntes de un diario: lo que durante el día impresionaba de alguna manera al dirigente encarcelado. Su atractivo no está solo en la elegancia lingüística, sino también en el afecto patriótico y la doctrina nacional.

Las narraciones poéticas, combinadas armoniosamente entre caligrafía clásica y moderna, abarcan diversidad de contenidos y temas. No obstante, lo más destacado de todo es la referencia a mujeres y a niños, que puede provocar lágrimas al lector. Desde entonces, acusa a la sociedad feudal corrompida y monstruosa en la China de aquella época.

La humanidad rebosa en todos los escritos, toca al corazón del receptor y a partir de eso, el autor manifiesta la aspiración de todo el país: la libertad. La escritura refleja la imagen del militar, quien tiene un espíritu revolucionario que los barrotes no pueden bloquear. Ese hombre con sus versos pervive en lo más hondo de cada espíritu vietnamita, en cualquier época.

Por otro lado, la esencia de la obra continúa en la tranquilidad del Tío Ho. Resulta difícil imaginarse que ese prisionero puede disfrutar la luna entre cuatro paredes inanimadas: “¿Qué hacer en la prisión, sin bebida ni flores / En noche tan radiante, luminosa y serena? / Mira el hombre a la luna que esplendorosa asciende / La luna mira al poeta, a través de la reja” (Claro de luna, página 28).

La poesía marca la habilidad de Ho Chi Minh. Cada poema muestra pinturas sobre seda que en unos cuantos trazos, logran atrapar la nostálgica belleza de un paisaje o la emoción de un gesto fugaz. Quizás estos escuetos versos revelen la personalidad de su autor mucho mejor que un grueso volumen de memorias.

Muchos años han pasado. El Diario de prisión ha movido varias conciencias y generaciones, algo que manifestó el escritor cubano Félix Pita en el prólogo de su versión: “Sobre todo, la admiración y el amor por el hombre extraordinario, el revolucionario, el estadista, el poeta, que con su vivir nos enseñó que no hay altura imposible para la condición humana”.

Pies de fotos: 1-La Editorial Van Hoa publicó Diario de prisión, de Ho Chi Minh, por primera vez en 1960 (foto tomada de Internet); 2-La versión en español del libro Diario de prisión fue realizada por Félix Pita Rodríguez y difundida en 1960 por la editorial Colección del Sur (Foto: Tu Cu Thi Thanh).

ERASE UNA VEZ LA HISTORIA INTERMINABLE

ERASE UNA VEZ LA HISTORIA INTERMINABLE

Michael Ende comenzó a escribir su novela en 1977 para finalmente ser divulgada dos años más tarde.

ERNESTO EIMIL REIGOSA,

estudiante de primer año de Periodismo,

Facultad de Comunicación,

Universidad de La Habana.

Michael Ende publicó “La historia interminable” cumplidos los 50 años. Medio siglo. Lejana ya en el tiempo había quedado su infancia. Pero hay genios que desafían el envejecimiento que sufren sus carnes y logran mantener una lozanía en su hacer y escribir. Su principal mérito: tocar nuestro niño interior con una apología a la imaginación. Creando, de paso, un libro que entra en la sección de clásicos de toda librería que se precie.

El protagonista es Bastian Baltasar Bux, un chico regordete y huérfano de madre que un día, huyendo de los insultos y maltratos de sus compañeros, entra en la tienda del señor Koreander. Allí ve un libro que le llama poderosamente la atención, “La historia interminable”. A sabiendas que actúa mal, el joven roba el libro y decide esconderse en el desván del colegio al que asiste para leerlo.

El argumento del texto sustraído comienza con un mundo, Fantasía, cuya soberana, la Emperatriz Infantil, ha caído enferma. La desconocida y extraña dolencia está teniendo graves consecuencias sobre todo su reino, a medida que ella se debilita, el propio mundo va desvaneciéndose. Es entonces cuando la Emperatriz manda buscar a Atreyu, un joven guerrero, a quien encomienda la misión de salvar el país.

Atreyu descubre que la edad de la emperatriz no es medida en años, sino en nombres, y que cada cierto tiempo un ser humano del mundo real debe bautizarla nuevamente. Este es el parteaguas de la historia. Quien debe nombrar a la regente es el propio Bastian, y para ello debe entrar en el libro.

El muchacho logra su objetivo de ingresar en la obra convirtiéndose en un personaje más. Como recompensa por los servicios prestados, le es regalado Áuryn, un medallón que cumple deseos y tiene en el anverso la frase “Haz lo que quieras”. Desde este punto, Atreyu acompaña a Bastian como consejero. Juntos pasean por la tierra de Fantasía conociendo a personajes tan ilustres como peculiares: los ayayai, Ygrámul el Múltiple, la Vetusta Morla y la pérfida Xayide.

Michael Ende, en entrevista ofrecida al periódico El País, expresó que la novela defiende la idea de encontrar la realidad que nos rodea tomando el camino inverso. “Cuando nos fijamos un objetivo, el mejor medio para alcanzarlo es tomar siempre el camino opuesto. Para encontrar la realidad hay que darle la espalda y pasar por lo fantástico. Para descubrirse, Bastian debe abandonar el mundo real, donde nada tiene sentido y penetrar en el país de lo fantástico, donde todo está cargado de significado”.

La narración en tercera persona es la que acapara toda la novela. Ende utiliza un complejo engranaje de técnicas donde en la primera parte de la historia, la cual transcurre en el mundo real y en Fantasía al mismo tiempo, se evidencia el uso de la caja china, recurso que después es abandonado al entrar Bastian al libro y formar parte de él.

Michael Ende ganó el premio Janusz Korczak por su relato. En su juventud militó en un partido antinazi. Murió a los 65 años debido al cáncer. Dueño de una prosa creativa que no deja a nadie indiferente, dada la invención de nomenclaturas raras e impronunciables y a la frescura presente en sus tramas. “La historia interminable”, la cual es considerada su obra maestra, no es la única de su autoría centrada en los niños, “Momo y los ladrones del tiempo” es otra extraordinaria novela juvenil, pero esa es otra leyenda y debe ser contada en una nueva ocasión.

Pie de foto: Portada de la edición de 1982.